Moscú/Copenhague. - El presidente de Rusia, Vladimir Putin, amenazó ayer con tomar represalias masivas contra el terrorismo, dos días después de que sus fuerzas de seguridad acabaran de modo violento con la toma del teatro Dubrovka de Moscú parte de un comando separatista checheno. Por su parte, el presidente de ese país del Caúcaso, Aslan Maskhadov, abrió una inesperada puerta de negociación a la histórica crisis con Moscú. Mientras, la Nación se vistió de duelo por las 117 vidas perdidas.
"Rusia nunca llegará a ningún acuerdo con terroristas y no se dejará extorsionar", advirtió Putin durante una reunión de su gobierno en Moscú. Si alguien trata de utilizar armas de destrucción masiva contra Rusia, "Rusia contestará a la amenaza con los mismos métodos, en todos los lugares en los que estén situados los terroristas y sus organizaciones", afirmó.
Putin realizó sus declaraciones mientras en toda Rusia se celebraban actos oficiales en el marco del día de duelo nacional por los 117 rehenes muertos en la operación de rescate con la que las fuerzas de seguridad pusieron fin a tres días de ocupación del teatro en el que se encontraban más de 800 rehenes.
Muchas personas acudieron por la mañana al teatro para depositar flores y encender velas frente al edificio, que fue desalojado en la mañana del sábado con el empleo de un gas narcotizante letal. Las clases en las escuelas rusas comenzaron con un minuto de silencio. Mientras, todas las actividades de diversión programadas fueron canceladas en la capital rusa, de más de 10 millones de habitantes.
Chechenia, dispuesta a negociar
En tanto, Ahmed Zakayev, portavoz del presidente checheno Aslan Maskhadov, anunció que el líder independentista "está dispuesto a abrir las negociaciones sin precondiciones" con Moscú para tratar de hallar una "solución política" al sangriento conflicto en Chechenia. "Podemos sólo resolverlo políticamente; y el presidente Maskhadov está dispuesto a sentarse a una mesa de negociaciones sin precondiciones. Le toca a la cúpula rusa decidir", dijo Zakayev en el Congreso Mundial Checheno que comenzó ayer en Copenhague.
Por su parte, el gobierno ruso ejerció duras críticas al denominado "congreso checheno en el exilio", que plantea un llamamiento al Kremlin para que retome de inmediato y sin condiciones las negociaciones de paz en Chechenia. Las autoridades rusas pidieron al gobierno danés que prohibiera la convocatoria, calificada por Moscú de reunión de terroristas.
Como consecuencia de la reunión, Putin suspendió la visita oficial que pretendía realizar a Dinamarca. Además, Dinamarca, que ejerce hasta fines de diciembre la presidencia semestral rotativa de la Unión Europea (UE), decidió trasladar de Copenhague a Bruselas una reunión de los Quince con Putin el 11 de noviembre, a fin de evitar una crisis diplomática entre el bloque y Moscú.
Mientras tanto algunos medios de comunicación rusos criticaron que la atención a los intoxicados tras la utilización del gas estaba mal planeada. Pero los médicos salieron a defenderse y destacaron que en ningún momento se les informó de que en el operativo se utilizarían gases. "Si lo hubiésemos sabido de antemano. Si nos hubiesen dicho que habría muchos que perderían el conocimiento o tendrían fallas cardiacas, todo podría haber sido un poco diferente", indicó un médico que prefirió resguardar su identidad.
Según las autoridades sanitarias, continúan hospitalizados unos 400 rehenes, mientras que 45 aún se debaten entre la vida y la muerte. Sin embargo, desde el domingo no aumentó la cifra de muertos.
El ayuntamiento de Moscú anunció el pago de indemnizaciones a las familias de las víctimas por un monto de 100.000 rublos (unos 3.160 dólares) por cada rehén muerto y de 50.000 rublos por cada rehén herido.
En la república autónoma rusa de Chechenia, el ejército ruso aseguró haber matado a unos treinta rebeldes en nuevos enfrentamientos con grupos armados separatistas. El gobierno de Rusia había anunciado una operación en Chechenia para buscar cómplices del comando rebelde que había tomado el teatro moscovita.
Además, un oficial de policía fue arrestado bajo cargos de complicidad con los rebeldes chechenos, según informó la agencia de noticias rusa Interfax. El agente está sospechado de haber informado a los chechenos en el interior del teatro sobre los movimientos de la policía por medio de un teléfono celular. (DPA, AFP y Télam)