El anegamiento del barrio Nuevo Alberdi se podría evitar si estuvieran concretadas las obras de infraestructura que la gente viene reclamando desde hace tiempo. Se trata de permitir el libre escurrimiento de los canales Ibarlucea y Salvat, más la construcción de ocho puentes viales y uno ferroviario. Hay que canalizar 17 kilómetros del Ibarlucea (3,6 están sobre el egido de Rosario) y 16 del Salvat (4,4 en Rosario), una obra que costaba hasta diciembre pasado 4 millones de pesos-dólares. Ya existe un tramo de mil metros del Ibarlucea que está canalizado, al igual que el arroyo Ludueña desde los entubamientos hasta la avenida Jorge Newbery. Según el secretario de Obras Públicas de la provincia, Edgardo Berli, el proyecto es uno de los que están considerados como "prioritarios" en el plan nacional de defensa hídrica y cuyo financiamiento es el fondo específico constituido mediante la recaudación del impuesto a los combustibles. Pero hasta ahora no fue licitado. Tampoco formará parte del convenio que firmará mañana el gobernador Reutemann con el presidente Duhalde, por el cual se actualizarán los costos de ochos obras hídricas para el departamento General López. Resta una decisión política para ponerlo en marcha.
| |