Mientras el árbitro Diego Abal se retiraba del campo de juego bajo un coro de insultos, el entrenador Adrián Taffarel no buscó excusas: "Las expulsiones fueron justas. Fueron dos golpes de atrás y el árbitro actuó muy bien", manifestó en un rapto de sinceridad. "Argentino hizo las cosas bien, incluso cuando quedamos con nueve. Estamos dolidos por la derrota pero lo nuestro fue meritorio", continuó el técnico, en un intento por rescatar los puntos salientes de su equipo. Taffarel admitió que les faltó "mantener la calma y tener la precaución que no tuvimos en los momentos de las expulsiones. Es indudable que los jugadores que fueron echados no se quisieron hacer expulsar, pero eso nos perjudicó".
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La Ciudad
