Dispersiones en los precios de los medicamentos superiores al 500 por ciento, según la marca con que se comercialicen, fueron advertidas a partir de un relevamiento realizado por la liga Acción del Consumidor (Adelco), entidad que defendió la utilización de genéricos para la prescripción de los remedios.
En un comunicado, Adelco se quejó de los "sucesivos e injustificados aumentos de los precios de los medicamentos; los escasos requerimientos para la autorización de venta de un producto y el casi nulo control de su calidad".
La entidad aseguró que prescribir genéricos reporta ventajas económicas para los pacientes, sin afectar la calidad de los medicamentos.
La entidad relevó un centenar de productos farmacéuticos y la dispersión de precios. La mayor diferencia se encontró en las cinco marcas de Penicilina sódica que alcanzó una diferencia del 566 % entre el precio más caro y el más barato.
La menor dispersión se dio en Bromazepan 3 miligramos: las 6 marcas analizadas mostraron un 53 % de diferencia.
Dentro de ese rango máximo y mínimo se ubican dispersiones del 65 % para las 6 marcas de Paracetamol; el 106 % entre las 5 de Lorazepan; 180 % entre las 6 marcas de Dexametasona; el 210 % entre las 13 de Ampicilina; el 211 % entre las 7 de Gentamicina; y un 231 % entre las 11 marcas de Amoxicilina.
"Apoyamos la disposición adoptada por la autoridad sanitaria nacional de introducir la prescripción por nombre genérico, habilitando al paciente a elegir el medicamento de más bajo precio, en la lista de genéricos que el farmacéutico tiene la obligación de exhibir", indicó la entidad.
Adelco recomendó que "para que esta nueva modalidad sea realmente beneficiosa para la población es conveniente que el paciente examine las alternativas con el médico al momento de la indicación terapéutica y exija al farmacéutico la lista de los medicamentos genéricos y sus correspondientes precios".
La emergencia sanitaria llevó al ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, a instalar el tema de los genéricos. González García ya había puesto en práctica su uso cuando fue ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, y se ganó la oposición de los laboratorios.
Semanas atrás dio a conocer un decreto, que ahora debate el el Congreso, por el cual faculta al Ministerio de Salud a fijar precios y al farmacéutico a cambiar el remedio recetado por el médico por otro de igual efecto y más barato.
Los medicamentos genéricos contienen los mismos componentes químicos que el remedio original pero son elaborados por laboratorios que no participaron de su descubrimiento. Pueden elaborarse una vez vencido el período de protección de patente sin obligación de pagar regalías. Por eso cuestan mucho menos que sus marcas conocidas.
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La Ciudad
