Aunque el renglón protagónico que eligió es evidentemente otro, Castellano todavía deambula por algunos recovecos de su carácter en busca de algún fuego escondido que coincida con el pináculo de su exposición en tiempos de irreverencias. Por eso, en algunos segmentos del toma y daca fomenta al Rifle versión década del 90 con las más genuinas ansias de emulación.
-¿Qué quedó de aquel pibe irreverente que arrancó en Central?
-Creo que nada. Igualmente nunca fui muy desbocado afuera de la cancha, sí en algunas situaciones del partido, como cuando iba a cabecear en el primer tiempo. Pero nunca me metí con un jugador de Newell's en especial, era más de calentar el folclore con eso de que Central es el más grande.
-¿Pero si hoy la situación lo ameritara volverías a cruzar la cancha para ir a cabecear en el primer tiempo?
-No, no. Esa etapa ya pasó, ahora estoy mucho más equilibrado.
-¿Te imaginás a Central en el descenso?
-No, cómo me voy a imaginar eso. Ni loco pienso que nos vamos a ir al descenso.
-¿Sabías que por la situación en la que están el hincha espera que en este torneo vos seas el titular?
-Reconozco que el hincha de Central me quiere, pero eso no quiere decir de que voy a atajar por el simple hecho de ser más hincha del club que otro jugador.
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La Ciudad
