Para consumir las horas en estas tierras serranas los jugadores matan el tiempo jugando al truco, a los videojuegos, al metegol o al pool. Uno de los que abrazó este deporte es Luciano Palos, quien se trenzó en un desafío con el utilero Pancho Aquilano. Las escasas condiciones de ambos hicieron que el partido fuera lamentable. El duelo fue parejo, pero al final Lulú (con más suerte que otra cosa) se quedó con el triunfo.
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