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Derechos y humanos II

Haciendo una excepción contesto por única vez al señor Daniel Varela y a lo que aparentemente no entendió. Noto en su inquietud el deseo oculto de pertenecer al privilegiado grupo de los "derechos y humanos" al que podrá adherirse si asimila debidamente los conceptos que detallo a continuación: Dejando a Maradona para que se dedique solamente a las pelotas, vamos a exponer ideas que seguramente él no produce. En su poco sutil razonamiento, no alcanza a comprender que es imposible ganar sólo con dialéctica o deformando la verdad sobre la guerra en la que perdieron sus admirados zurdos en nuestro suelo. Una guerra en la que se jugaron nuestra libertad y nuestros principios éticos contra un enemigo artero que planeaba enarbolar un trapo rojo en nuestra patria. Y no sé si después de este maldito recuerdo todavía son necesarias otras explicaciones para justificar un voto negativo argentino hacia Cuba, con la dictadura exportadora permanente de guerrilleros y de semillas de odio con sus ideas progresistas que ni siquiera en su territorio han visto florecer. Volviendo a nuestro país impunemente devastado en una década de corrupción y donde la miseria avanza sobre la educación, la salud, la justicia y el hambre de la mayoría, usted deberá convenir conmigo que es imposible e injusto que se destinen fondos y esfuerzos en otra cosa que no sea paliar necesidades perentorias. Y no está entre esas necesidades la creación de ningún museo, ni la compra de ninguna casa para homenajear a personajes ajenos a nuestra tradición, como propuso su pintoresco y admirado futbolero al intendente de nuestra ciudad. No sé si esta sucinta explicación será comprendida, pero propongo al señor Varela que ahorremos energía para el futuro cercano, tan oscuro como dudoso y con la Patria casi destrozada por la anarquía nos preparemos todos para refundarla sin corruptos con leyes más justas.
Carlos Alberto Vallejos