María Laura Cicerchia / La Capital
La Cámara de Senadores de la provincia citó al ministro de Gobierno santafesino, Esteban Borgonovo, para que comparezca en el recinto durante la segunda quincena de abril con motivo del descubrimiento -en el mes de octubre pasado- de pistas de aterrizaje clandestinas utilizadas para el contrabando de cigarrillos en la zona centro-norte de la provincia. El responsable de la cartera política deberá comparecer en el Senado luego de que el área a su cargo respondiera de manera "poco satisfactoria" distintos pedidos de informes elaborados por el cuerpo legislativo. Mientras tanto, según investigaciones y datos extraoficiales que manejan los propios senadores, las pistas siguen funcionando sin ningún tipo de control en la provincia de Santa Fe y reportan a los contrabandistas ganancias por 2 millones de pesos semanales.
Paralelamente, la Cámara baja solicitó a la Dirección de Catastros e Información Territorial que remita copias de las fotos aéreas del territorio provincial para localizar todas las pistas existentes. También requirió a la Fuerza Aérea Argentina un detalle de las pistas que cuentan con habilitación. Con esta información en la mano, los legisladores pretenden cotejar ambos relevamientos para deducir cuántas son las pistas clandestinas que funcionan en Santa Fe.
Las resoluciones fueron tomadas por unanimidad en la sesión del 21 de marzo pasado a pedido del senador radical por el departamento San Cristóbal, Felipe Michlig. De esta forma, el cuerpo se lanzará a investigar por su cuenta los casos de contrabando, por los que hasta el momento hay dos personas procesadas por encubrimiento y ningún detenido.
En el mes de octubre de 2001, cuando se detectaron pistas clandestinas y cargamentos de cigarrillos contrabandeados en distintas localidades de los departamentos La Capital, 9 de Julio, General Obligado y San Justo, el Senado ya había solicitado una serie de informes al Ministerio de Gobierno.
En ese momento quería saber si existía un relevamiento de las pistas de aterrizaje y qué repartición era la encargada de controlar el tráfico aéreo. Pero esos pedidos sólo cosecharon contestaciones imprecisas: "De esas respuestas no se rescata ni un diez por ciento. Desde el Ministerio de Gobierno no ha habido hasta el momento una preocupación para ver qué está pasando", planteó Michlig, quien asegura que a pesar de haber sido descubiertas y existir causas penales en curso, las pistas se siguen utilizando.
"No hay dudas de que siguen funcionando. Hay denuncias muy graves a partir de distintos trabajos de investigación que detectaron la existencia de un eje Santa Fe-Paraná en el cual se comercializan y distribuyen las cargas de cigarrillos que vienen a diario. Esto genera un movimiento de 2 millones de pesos por semana", señaló Michlig.
De acuerdo a investigaciones y datos extraoficiales recabados por el legislador, el tráfico de cigarrillos por vía aérea desde Paraguay es obra de una sola banda con asiento en ese país. "Está muy bien organizada, es muy poderosa, y mueve mucha cantidad de cigarrillos por semana", destacó.
Incluso se detectó la existencia de un reacomodamiento de los precios post-devaluación en el mercado negro: de costar un peso, el atado de 20 cigarrillos proveniente del contrabando pasó a comercializarse a 1,20.
Según el senador, la inspección y habilitación de las pistas está a cargo de la Dirección de Habilitación y Fomento de la Fuerza Aérea Argentina, pero en los hechos "nadie controla el espacio aéreo".
"Es sorprendente el nivel de impunidad que tienen los contrabandistas y por eso me llama la atención que desde octubre hasta ahora no se haya tomado ninguna medida. Ante un flagelo tan grande y tan grave que atenta contra las economías regionales y los negocios legales, y que no aporta ningún impuesto, los gobiernos provincial y nacional tienen que preocuparse", cuestionó Michlig.
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