Se aproxima el 15 de abril y los tenedores de plazo fijo deben tomar una determinación sobre sus ahorros. La pérdida ha sido muy importante ya que los tenedores de plazo fijo en dólares vieron pesificadas sus tenencias a 1,40 peso, y actualmente, en el mercado, el dólar está orillando los 3,00 pesos. De esta forma la pérdida por la pesificación ya supera el 50% del valor original en dólares del plazo fijo.
Muchos no desean reconocerlo, pero esta es la realidad. Como atenuante, el gobierno permitió que estos certificados se indexen por el CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia o Convalidación de Estafas Reiteradas como lo llaman en la popular) para de esta forma atemperar la pérdida de valor contra la moneda estadounidense.
Sin embargo, los bajos índices de inflación en los primeros meses del año (apenas 10% en tres meses) versus una devaluación de la moneda equivalente al 200% hacen que el CER sea una tortuga frente a la liebre en que se ha transformado el dólar.
La única chance que tiene el CER de alcanzar e igualar al dólar, es si el tipo de cambio se estabiliza si se decide anclar el tipo de cambio o anclar la moneda. En la medida que Argentina no logre recuperar la confianza y que se estabilicen las principales variables económicas, el CER correrá de atrás al dólar.
Dentro de las alternativas que se ofrecen para con los plazos fijos, se pueden realizar las siguientes operaciones, en orden de importancia: Lo más conveniente sigue siendo comprar un bien registrable, un inmueble, auto, barco y maquinaria industrial nueva. Los fondos del plazo fijo que se entregan al vendedor pueden utilizarse para constituir un nuevo plazo fijo (nadie cree que esto se haga); se puede cancelar una deuda bancaria (el plazo fijo debe estar constituido en el mismo banco de donde proviene la deuda) o bien depositarse a la vista.
Generalmente los bienes registrables no mostraron una suba importante en términos de dólares. Recuerde: la fecha límite es el 15 de abril.
Entre el plazo fijo y los bonos
Endoso a terceros: Estuvo siempre vigente pero ahora creció notablemente; es posible vender el plazo fijo y hacerse de dinero bancario, no efectivo, ya que las transacciones por un valor mayor a $1.000 deben realizarse en cheque. El descuento oscila entre el 20 y 22%, por ende el tenedor del plazo fijo cobra entre el 80% y 78% del total pesificado. El comprador, en general, utiliza el certificado para cancelar una deuda bancaria. El vendedor sale a comprar dólares de alguna forma, es la segunda mejor alternativa y luego de estas dos primeras, el resto no califica como conveniente, pero igual las enumeramos a continuación.
Canje por Bonos del Estado: el gobierno emitió tres bonos, dos en dólares y uno en pesos, pero lamentablemente estos títulos están bajo ley argentina, y como la misma ha sido sistemáticamente violada, transformando los títulos existentes de dólares a pesos, no parece creíble tomar esta opción. Es como quien fue estafado una vez, y busca que lo estafen de nuevo. No resulta conveniente. La fecha límite es el 15 de abril. Algunos pretenden extenderla hasta el 25 de abril, pero seguramente no tendrán éxito.
Quedar reprogramado o la estafa continua: Esto implica ir a la reprogramación, que seguramente terminará en una re-reprogramación, ad infinitum. Una vez nos contaron que había un corralito por 90 días, después los fondos fueron inmovilizados, después reprogramados y mañana vendrá otro cuentito. Además quedamos pesificados y con CER; por eso no es recomendable. Luego de estas opciones quedan algunas alternativas adicionales, como por ejemplo, la fantasía presentada la última semana y que consiste en creer que a partir del mes de enero del año 2003 las entidades financieras pueden optar por comprarle el plazo fijo al ahorrista, en el marco de cesaciones de pago generalizadas de grandes empresas argentinas.
Otras dos opciones neutras son: cancelación de impuestos, que se pueden realizar hasta el 25 de abril inclusive. Pueden pagarse todos los impuestos nacionales, provinciales y municipales que vencen a esa fecha. También se puede aplicar para pagar el anticipo de 3% de la moratoria.
La otra opción es pagar créditos, siendo esta opción vigente en la medida que el plazo fijo y el crédito estén en el mismo banco. El plazo fijo puede aplicarse a cancelar un préstamo sin límite alguno. Las alternativas son de lo más variadas, pero para aquellos que tengan un plazo fijo y no tengan deudas y estén al día con los impuestos lo mejor es comprar un bien registrable o vender el plazo fijo. Para optar por esta última alternativa hay que apurarse porque cada suba del dólar diluye el capital estafado, perdón pesificado.