¿Cual será el nuevo precio para los granos, la leche y la carne?, se pregunta Juan Porstmann, de la Fundación Fortalecer. Para ello ensaya algunos números para entender las distintas producciones.
Para el caso de los agricultores esta ecuación es algo más sencilla. En pesos, el valor de los granos subirá y este ingreso adicional superaría el costo adicional por el aumento de costos en los insumos importados.
Para el caso de la soja, el margen bruto en pesos -entendido como el residuo entre los ingresos y los costos directos- tendría un aumento del 45 por ciento y de sólo un 6 por ciento si se compara en dólares. Estos resultados rigen si no hay tipo de cambio diferencial o de retenciones. Por otra parte, no están contado el pago de las deudas financieras no pesificados, que puede significar un retroceso del 40 por ciento.
El tambo
Con respecto a la actividad "tambo", los resultados indican que al precio actual de 0,13 $/litro en un escenario de paridad uno a uno el beneficio anual en pesos (descontados los costos directos y de estructura, el servicio de la deuda financiera "no pesificada" y un mínimo retiro familiar) reflejaba una situación de quebranto. Un aumento del precio de la leche del orden del 20 por ciento en el escenario de paridad 1 a 1,4 significaría la misma situación de quebranto; mientras que un aumento del precio del orden del 30 por ciento implicaría alcanzar un beneficio igual a cero.
Para el caso de la ganadería, específicamente la actividad invernada, los resultados indican que al precio actual de 0,80 $/kg en un escenario de paridad uno a uno el beneficio anual reflejaba también una situación de quebranto. Un aumento del precio del Kg de novillo del orden del 21 por ciento en el escenario de paridad 1a1,4 significaría la misma situación de quebranto; mientras que un aumento del precio del orden del 45 por ciento implicaría alcanzar un beneficio anual en pesos igual a cero.
La Ciudad
