Hace exactamente un año, Joaquín Sabina mantuvo un diálogo telefónico con Escenario desde Mendoza, antes de presentar su álbum "Nos sobran los motivos" en el Anfiteatro Humberto De Nito. En aquella oportunidad el cantautor respondió sobre el carácter de "combustible poético" que tiene el vino, según algunos escritores como Omar El Kayam. "Estoy en Mendoza, hablando contigo frente a un papel en blanco en el que quiero terminar de escribir una canción y con una maravillosa botella de vino mendocino...". Eran tiempos en los que sus placeres de sibarita no sabían de restricciones médicas. "Creo en los placeres, es decir en un buen beso, un buen vino, una buena charla con amigos en uno de esos días en que a uno no le duelen las muelas y puede disfrutar de las cosas. Creo que si la vida no tuviera esas compensaciones de vez en cuando esto sería una mierda". El músico, a los 50, se reveló inmune al paso de los años: "Nunca he tenido crisis por la edad. Ocurre que los 50 es una edad tan redonda que se presta mucho para hacer balances. Yo, en mi vida, me considero incapaz de madurar. Siempre me sorprende mucho que me traten como a un padre cuando yo sigo considerándome un hijo".
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