La escudería italiana Ferrari pintó el frente de sus bólidos de negro en señal de luto por los atentados en Estados Unidos durante las series de clasificación de ayer en el Gran Premio de Italia de Fórmula Uno. Por su parte, Daimler Chrysler, compañía asociada con la escudería McLaren-Mercedes, dijo que creó un fondo de 10 millones de dólares para los hijos de las víctimas de los atentados, mientras la escudería prometió hacer una fuerte contribución. El jefe de McLaren, Ron Dennis, indicó que su escudería donará varios cientos de miles de dólares durante el Gran Premio de Italia. Ferrari además de pintar el frente de sus monoplazas de negro quitó de la carrocería de sus vehículos y de los trajes de los pilotos todos los anuncios publicitarios. "Ferrari tomó la decisión de dar una muestra de que comparte el dolor con el pueblo estadounidense y eliminó la publicidad para el Gran Premio de Italia. El domingo la carrera será una competencia deportiva sin implicaciones comerciales", indicó la escudería en un comunicado. Muchos de los patrocinadores de Fórmula Uno tenían
empleados en los Torres Gemelas atacadas el martes. Al mediodía todos los pilotos y
mecánicos se unieron en silencio apagaron el motor de los coches y se pararon junto a los boxes con la cabeza baja en señal de respeto.
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La Ciudad
