La producción textil tuvo una mala performance en todo el país. Así lo reflejó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en su encuesta de julio en la que se señala que la fabricación de productos textiles soportó una reducción del 11,9% respecto de junio, ubicándose entre los segmentos más castigados por la crisis. En el acumulado del 2001 contra el 2000, la reducción de producción en el sector fue del 14%. En Rosario y su zona la caída fue de un 10% mayor y se explica, según manifiestan los empresarios, por la profundización de las complicaciones económicas en la segunda ciudad del país en número de desocupados y subocupados y porque, como si fuera poco, durante varias semanas se soportó un "veranito" atípico para la fecha. Los empresarios locales del rubro no tienen muchas expectativas de recuperación ya que, aseguran, la erosión que provocaron más de tres años de depresión sólo podría revertirse parcialmente de la mano de políticas activas, un profundo control en las aduanas y una enorme flexibilización de las condiciones que imponen los bancos para otorgar créditos. La opinión de los rosarinos se condice con las de sus pares en todo el territorio nacional. En la misma encuesta del Indec que se mencionaba anteriormente se refleja que el 60% de los empresarios argentinos no espera que las "malas" condiciones cambien en breve y el 84,8% manifestó que no modificará sus stocks, el 12% dijo que espera una mejora y el sólo el 3% se mostró optimista.
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La Ciudad
