La Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel), think tank del ex ministro de Economía Ricardo López Murphy, presentó en la convención de bancos su visión sobre la Argentina para la próxima década, con reforma impositiva incluida. Fue Daniel Artana el encargado de presentar el trabajo, que recoge los principales lineamientos del programa que anunció López Murphy cuando ocupó la cartera económica. Al igual que la mayoría de los institutos económicos que presentaron su propuesta, Artana colocó como plataforma de lanzamiento para una reforma impositiva profunda, el corset que se colocó al gasto público en el último pacto fiscal, firmado en diciembre de 2000. En este sentido, consideró necesario una revisión en la asignación de las facultades tributarias entre los distintos niveles de gobierno. "Las provincias deberían retomar en lo inmediato la posibilidad de aplicar impuestos que no plantean mayores dificultades para una administración descentralizada, como combustibles e internos", dijo. Artana insistió con la eliminación del impuesto a los sellos, que deberían ser suplantados por impuestos sobre la propiedad. También con la sustitución de ingresos brutos por un IVA provincial con una alícuota del 5%. Según los hombres de Fiel, esto debería habilitar a los municipios a aplicar un impuesto sobre las ventas minoristas y eliminar así la tasa de seguridad e higiene. Artana expuso que como mecanismo de transición "el impuesto sobre los ingresos brutos podría comenzar por su transformación en un impuesto bietápico al comercio mayorista y minorista, desgravándose completamente la industria y el sector agropecuario". Por otra parte, el impuesto a los combustibles pasaría a ser potestad de las provincias. También propuso la eliminación del régimen de coparticipación de impuestos y los régimenes de transferencias de recursos como el fondo especial del tabaco o los reembolsos por puertos patagónicos. A cambio, se crearía un Fondo de Redistribución Regional (FRR), que tendría como finalidad de redistribuir recursos entre jurisdicciones (que serán financiados con una fracción de la alícuota del nuevo IVA provincial), de modo tal que, en la situación inicial, no cambie la posición relativa de ninguna provincia respecto de la situación actual. Además, propone la creación de un Organismo Fiscal Federal (OFF) que introducirá (por la aplicación de mecanismos de incentivos, incluyendo sanciones a las provincias que no cumplen) confiabilidad, transparencia y flexibilidad al sistema. La propuesta de reforma también incluye la reducción de las cargas patronales, la reducción del mínimo no imponible en el impuesto a las ganancias y la eliminación del impuesto al endeudamiento empresario.
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