Los abogados de las familias de dos religiosas francesas desaparecidas en la Argentina en 1977 pidieron a la Justicia francesa que reactive su orden de arresto contra el ex capitán de fragata de la Armada Alfredo Astiz.
Los letrados Sophie Thonon y Jacques Michel expresaron ayer su satisfacción por la detención de Astiz, quien se presentó antenoche en la División Operaciones de Interpol a raíz del pedido de captura librado por la jueza federal María Romilda Servini de Cubría.
Los abogados rápidamente solicitaron a las autoridades judiciales francesas que hagan lo necesario para que Astiz sea detenido "también en virtud de la orden de arresto" emitida por Francia hace más de diez años, tras la condena dictada por el Tribunal de París.
Astiz, quien fue detenido a petición de la Justicia italiana por la desaparición de tres italianos durante la dictadura, fue condenado en rebeldía a cadena perpetua por el Tribunal en lo Criminal de París el 16 de marzo de 1990, por la desaparición de las religiosas francesas Léonie Duquet y Alice Domon.
Pero la orden de arresto francesa enviada por medio de la Interpol nunca fue ejecutada por las autoridades argentinas, según recordaron ayer los abogados de las familias de las dos religiosas en un comunicado.
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Mientras, en Buenos Aires y pese a que el pedido de extradición todavía no llegó a la Argentina, ya empezaron a oírse voces a favor de que el gobierno de Fernando de la Rúa finalmente la conceda.
El diputado de la agrupación Argentinos por una República de Iguales (ARI) Jorge Rivas dijo que la administración delarruista "tiene la obligación de asumir que la Justicia argentina en su momento no pudo juzgar a los ejecutores del plan criminal de la dictadura".