El seleccionado Sub 20 de Argentina, que entusiasma con sus goles, fútbol asociado y destellos de brillantez típicos de los equipos dirigidos por José Pekerman, enfrentará hoy a China por los octavos de final del Mundial de la categoría, en el que superó con holgura la fase clasificatoria y se perfila como candidato para lograr el título.
El encuentro se jugará a partir de las 17 en el estadio José Amalfitani, de Vélez Sarsfield, y será arbitrado por el escocés Thomas Mac Curry.
Argentina tiene claro su objetivo, que no es otro que el tetracampeonato de la categoría (ganó anteriormente las copas de Tokio 79, Qatar 95 y Malasia 97), y utilizó la primera fase como un mero ensayo para pulir defectos, algo que logró con el correr de los partidos, cuando dejó de ser un puñado de buenas individualidades y mostró reflejos típicos de un equipo serio.
Antes de comenzar el torneo ya se intuía que el rival a vencer era Brasil, que también pretende conseguir su cuarto título y superó con autoridad en el grupo B a sus rivales de turno, aunque para llegar a una eventual definición con el clásico rival deberá sortear antes compromisos de distinta envergadura.
El equipo argentino fue una máquina de convertir -totalizó 14 tantos en tres partidos de la zona A-, incluyendo la mayor goleada del torneo, que fue el 7-1 sobre Egipto (fue también el mejor registro histórico de un seleccionado nacional en torneos mundiales), y tiene además a uno de los artilleros del campeonato, Javier Saviola, máximo anotador junto al brasileño Robert con cinco conquistas.
Su rival de hoy, el equipo chino orientado por Shen Xiangfu y asesorado por Bora Milutinovic (entrena al seleccionado mayor), no debería a priori complicarle la existencia al conjunto de Pekerman.
Los asiáticos se mostraron como un seleccionado sin aristas destacables, con tan sólo un jugador para mencionar como el defensor Lin Zhou.
Los chinos resultaron terceros en el grupo C jugado en Mendoza, por detrás de Ucrania y Estados Unidos, rival ante el que lograron su único triunfo.
Respecto del partido de hoy, el entrenador José Pekerman realizará un solo cambio respecto de la formación que afrontó la fase clasificatoria: Nicolás Burdisso por Mauro Cetto.
El marcador central de Boca Juniors, que quedó a disposición del seleccionado tras jugar la primera final de la Copa Libertadores de América ante Cruz Azul y fue suplente el sábado pasado ante Jamaica, reemplazará al eficiente Cetto, quien hasta el momento había respondido con creces en su función.
Esa variante, si se tiene en cuenta la capacidad del rival, no altera sustancialmente la esencia del equipo, que pasa por la categoría de Fabricio Coloccini en el fondo, la calidad de Maximiliano Rodríguez y Leandro Romagnoli en la zona de creación, y el desequilibrio del Pibito Saviola en ofensiva.
Con esos argumentos Argentina entusiasmó al público, al punto que se espera un marco importante en Vélez, incrementado esto porque tras decantarse el pool de 24 equipos que comenzaron el torneo, llegó la hora de la verdad con eliminación directa y las consecuencias decisivas de un error, lo que resalta la emoción de la Copa del Mundo argentina.
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La Ciudad
