Mario Candioti
Cali (Enviado especial).- Es tiempo de verdades, de mostrar en una parada durísima los argumentos que lo depositaron en esta instancia de cuartos de final de la Copa Libertadores. Para este Central del Patón Bauza llegó el tiempo de demostrar que no fue casualidad. Y el América de Cali tal vez sea la medida justa. El tiempo de demostraciones es esta noche en el legendario Pascual Guerrero, donde alguna vez pasó el Newell's del Loco Bielsa para eliminar a estos mismos diablos rojos en semifinales de la Copa del 92, a las 20.15 hora local (22.15 de la Argentina) y con el uruguayo Jorge Larrionda como juez. La ventaja mínima condiciona sin dudas a los canallas, aunque el equipo azucarero pareció no mostrar mucho más de lo que se insinuaba en la previa. Y si bien Central careció de peso ofensivo -el gol de Juan Pizzi que marcó la diferencia final en el que el marcador pareció sacado de otro contexto- en el partido del Gigante, vale la pena recordar que los canallas resolvieron muy bien dos partidos clave: ante Vélez en el Amalfitani y ante Cobreloa en el desierto de Calama. La obligación es toda del equipo de Jaime de la Pava, que seguramente no pondrá margen para el estudio y saldrá desde el vamos a presionar de tres cuartos de cancha hacia arriba, tratará de anular a Ezequiel González e intentará hacer uso de sus mejores armas: buen manejo de la pelota y una envidiable velocidad final que mantendrá en vilo permanente al fondo auriazul. Con delanteros como Ferreira y Vásquez habrá que estar bien atentos, pero también con el lateral Jersson González, un morocho habilidoso y con buen criterio para proyectarse. Con el partido así planteado, a Central pueden aparecerle los espacios para la contra. Y eso es a lo que apuesta el Patón Bauza, tal cual lo afirmó después de su victoria en Rosario. Si los canallas no ceden la iniciativa y plantean el partido como ante Vélez o Cobreloa, la historia puede ser otra. Pero como de especulaciones se trata, la suerte de Central quedará sellada en 90 minutos o en la serie de penales, en caso de que los caleños se impongan por la mínima diferencia. El clásico quedó muy lejos en tiempo y espacio. La verdad del presente y la suerte del futuro está planteada sobre el paño verde del Pascual Guerrero. Central es dueño de su propio destino, por más que el América intente condicionarlo.
| |