"Lo seguí a mi hermano Tito", dice Juan Ramallo ("Ramallito") al recordar por qué decidió dedicarse al boxeo. Y no le fue mal. Llegó a ser campeón argentino Guantes de Oro (5 de mayo de 1953), un certamen que creó Juan Domingo Perón. Los vecinos de Arroyito recibieron al ídolo a su llegada del Luna Park y lo vivaron. Ya era un personaje. Ramallito trabajó siempre: primero como guardián del zoológico municipal y después en su puesto ubicado frente al Banco Nación (Alberdi y Juan José Paso) que tiene todavía desde hace años. Todos lo conocen y saben de sus éxitos como deportista. Vivió siempre en el barrio y peleó en su referencial estadio Norte (Alberdi y José Ingenieros), edificio actualmente semi abandonado. Juan cuida las bicicletas de quienes van al banco, vende praliné, billeteras y portadocumentos. Todos los meses recibe unos pesos como jubilado municipal. Así se gana la vida.
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La Ciudad
