El ajuste lanzado ayer por el gobierno nacional de la mano del ministro de Economía, Ricardo López Murphy, le transfiere a las provincias el pago del Fondo de Incentivo Docente, que significa 770 millones para todo el país y más de 60 millones para Santa Fe. De ahora en más los maestros del interior del país cobrarán este adicional de su salario si los gobiernos provinciales reasignan sus propios recursos y en la medida que las cuentas lo permitan. El gobierno santafesino criticó duramente la actitud del Ejecutivo nacional e indicó que es inviable que la provincia se haga cargo de este pago que compete a la órbita nacional. El ministro de Hacienda, Juan Carlos Mercier, calificó ayer en diálogo con La Capital como "perversa" la actitud del gobierno nacional que "intenta eludir su responsabilidad y la quiere trasladar a los gobiernos provinciales". El funcionario se quejó de que "se incumple con las promesas efectuadas a la educación, promesas que se reiteraban y se ratificaban hasta hace quince días atrás". Explicó que "hay una actitud perversa porque en su ineficacia de lograr el equilibrio fiscal, en lugar de decirles (a los maestros) «no les voy a pagar», les dice «el que les va a pagar es la provincia»". El decreto de López Murphy establece que las provincias dejarán de recibir las partidas del Fondo de Incentivo Docente. Aunque prevé una reasignación de recursos del Fondo del Tabaco y del Gas para cubrir el desfinanciamiento en Educación, éstos son proyectos de ley que deberán pasar por el tamiz del Congreso, quizás infranqueable. Mercier dijo que para la provincia resulta inviable hacerse cargo de ese agujero fiscal de 60 millones, porque ello derivaría en graves consecuencias. Dio algunos ejemplos: "Para tener una idea de sustitución, como se pretende, aún cuando la provincia de Santa Fe no construyera una sola vivienda en un año, no alcanzaría toda la plata del Fonavi para pagar el incentivo. O si se quiere, nosotros deberíamos tomar el 100% de la recaudación por patente automotor y en vez de dárselo a los municipios, cedérselos a los maestros.". Consultado sobre qué hará la provincia, Mercier disparó que "esa pregunta ni siquiera hay que plantearla porque es una actitud perversa; acá la perversidad es desviar la responsabilidad; y la responsabilidad es del gobierno nacional". Y remató: "La pregunta que hay que hacerse es cómo va a hacer el gobierno nacional para cumplir con el compromiso que tomó con los docentes". El ministro López Murphy volvió a hablar de la supresión de las transferencias: "Estas decisiones en general van a tener un ámbito de discusión en el Parlamento, que tendrá que resolver de la mejor manera posible la transferencia a las provincias del pago del incentivo docente, que va a obligar a las provincias a hacer la reforma política". El paquete de medidas incluye también un recorte de 100 millones de pesos los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a las provincias, que deja unos 100 millones a repartir. En el acuerdo firmado el 3 de noviembre entre los gobernadores y el Estado nacional, a la provincia se le asignaban 8 millones, que ahora sufrirán un recorte aún no determinado. "Ocho millones ya era un porcentaje muy bajo respecto de esas partidas, y en el supuesto de ahora se reduzcan a la mitad pueden estar quedando unos 100 millones anuales, lo que da casi muy aproximadamente el porcentaje que la provincia tiene en los índices de coparticipación que son del ocho y pico por ciento. Con lo cual, no sólo porque hay un convenio que hay que respetar sino porque es el porcentaje que aproximadamente le corresponde a la provincia, vamos a seguir exigiendo el pago del mismo", enfatizó Mercier.
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