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 sábado, 13 de octubre de 2007  
Nuevas caras. En diálogo exclusivo, Binner dio algunas pistas sobre cuáles serán sus primeros pasos en la Casa Gris
“Con una administración que se va no se puede hablar de gobernabilidad”

Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

El gobernador electo Hermes Binner marcó ayer el campo de juego y sacó a su equipo a la cancha. Su distensión parece obedecer a que sabe que aún no comenzó el largo partido que deberá dirigir durante los próximos cuatro años. “Estamos precalentando”, le dijo a La Capital en clave futbolística. Minutos antes había anunciado la primera línea de su gabinete, compuesta por varios ministros más de los que hay hoy en la Casa Gris. Luego encaró el diálogo exclusivo, en el que una vez más envió señales pacifistas al peronismo provincial, al que, sin embargo, diferenció del gobierno de Jorge Obeid. Dijo estar dispuesto a conversar la gobernabilidad con quien sea pero que ello no se puede hacer con una administración que se va. La palabra consenso fue la que más repitió en la charla con este diario.

   —Ya definió el gabinete, ¿cuál será la decisión con la que piensa inaugurar la gestión?

   —Convocar a la comunidad educativa para que nos ayude a poner en valor las escuelas.

   —¿Cómo piensa que será la oposición del PJ?

   —Hemos trabajado muchos años con el justicialismo como oposición en el Concejo Municipal de Rosario.

   —¿Eso qué quiere decir?

   —Ningún proyecto de ordenanza, entonces, y ningún proyecto de ley, en este caso, que sirva para mejorar la vida de los santafesinos se debería trabar. Si hay consenso en ello...

   —¿Cómo está la marcha de la transición?

   —Ahí está.

   —¿Existen otros contactos para garantizar un marco básico de gobernabilidad?

   —Con un gobierno que se encuentra en la culminación de su gestión no se puede dialogar sobre ello.

   —¿Con quién entonces?

   —Con los que sea necesario. Yo no soy y nunca fui un gorila, y eso es una ventaja.

   —¿Para qué?

   —Para la disposición al diálogo. Todos los ministros irán a la Legislatura cuando se los llame. Es más, les recomendaré que vayan antes de que los llamen.

   —¿Algún mecanismo de informes regular?

   —Algo así, tal vez. Y cuantas veces quieran que vaya el gobernador al Parlamento, irá a dialogar con los representantes del pueblo.

   —¿Qué perfil tendrán en su gestión los organismos de control?

   —El organismo de control es importante si hay un servicio privatizado. Si no, están previsto en la Constitución y las leyes. Hay numerosas instancias de control, desde la Defensoría del Pueblo, el Tribunal de Cuentas, la propia Legislatura, que ayudan a que estemos informados de lo que pasa en el ámbito público.

   —¿Cómo recibe la provincia?

   —Todavía conocemos poco sobre la situación en que se encuentra la provincia. De todos modos la gente espera un cambio, una renovación de la política, y nosotros tenemos que ver cómo satisfacemos eso.

   —¿Cuánto tiempo durará esa expectativa?

   —Tenemos un programa, este gabinete y creemos que se puede llevar adelante una acción transformadora de la provincia. Dentro de dos años (cuándo se realicen las primeras elecciones legislativas que deberá afrontar su gestión) sabremos si la gente no premia o nos castiga. Con ese simple papelito blanco de letras negras que se tira por las calles pero que en la urna tiene un peso increíble.

   —Además de la autonomía municipal, ¿cuáles son los otros ejes de la reforma del Estado que usted propone?

   —La integración para hacer una regionalización de la provincia que guarde coherencia con un proyecto de desarrollo integral y abarcativo de todo el territorio por igual. Actualmente cada ministerio tiene una regionalización propia que no coincide con la de otros. Salud tiene siete regiones, Educación nueve, la policía diecinueve. Tiene que haber un diálogo interregional entre Salud, Producción, etcétera.

   —¿Cuál será el futuro de la Legislatura?

   —Depende de una reforma constitucional.

   —¿Usted quiere hacerla?

   —Tenemos que hacerla porque estamos en mora en relación a la Constitución nacional.

   —¿Llamaría a elección de convencionales constituyentes en lo inmediato?

   —Es importante consensuar una reforma constitucional que permita integrar la provincia a partir de la realidad que hoy tiene.

   —¿Bonfatti será ministro Coordinador y de Gobierno a la vez, teniendo en cuenta que se elimina la primera cartera?

   —Se eliminó el nombre, pero le dimos más funciones. Por ejemplo, la de jerarquizar la relación con los intendentes. Lo mismo con la autonomía municipal, que es en lo que debemos avanzar, todo dentro del marco de la reforma del Estado.

   —Usted anunció que la conducción de la policía saldrá de la propia fuerza, ¿cómo será eso?

   —Lo que estamos proponiendo es crear una nueva policía a partir de la que está. También dije que la conducción de la fuerza estará a cargo del ministro de Seguridad, que es un civil.
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Binner comenzó a mostrar las cartas de su futura gestión.

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