Tras la pista de otro pagaré

Otro de los pagarés con los que se cancelaron las compras de los jugadores Juan Marcelo Ojeda, Marco Ruben y Cristian Villagra, sigue en la mira de la Justicia. Se trata del valor que vence en 2008 y que fuera embargado, por 750 mil dólares, por un ignoto personaje llamado Juan Carlos Alvarez, quien en realidad escondería a un conocido empresario del rubro joyería que prefiere el anonimato.

Ahora la jueza Liliana Giorgetti le reiteró a la sindicatura que revise los fundamentos de ese embargo y, en caso de detectar anormalidades, haga la denuncia penal del caso.

Las sospechas se dispararon luego que se comprobara que Alvarez vive humildemente en un barrio Fonavi y su declaración de recursos no tiene relación con la suma que reclama haberle prestado a Central.

Ahora la Justicia estaría investigando la ruta del dinero, que habría estado en custodia en un banco de Buenos Aires y luego transferido a una cuenta del conocido joyero.

Pero la investigación también alcanzaría a los profesionales que intervinieron en esa operación, quienes tendrían vinculación con el club.

Pedido de quiebra
Un nuevo embargo sufrió Central luego de cambiar el otro pagaré de 1.440.000 euros, devuelto por un abogado local y previamente cedido por ex directivos.

El reclamo, mucho más importante porque se trató de un pedido de quiebra, tiene algunas características similares al anterior mencionado. Es que lo habría presentado una persona de apellido Ríos, que habría actuado de prestamista y que no tendría la solvencia necesaria. El monto pedido es de 726.000 pesos, pero se embargaron 900.000 por previsión de costas.

Ese embargo impidió que la dirigencia pagara premios atrasados por un monto de 60.000 pesos y parte de las primas adeudadas, aunque sí puso al día a todos los empleados canallas en materia sueldos.