Año CXXXVII Nº 49461
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
El Mundo
Opinión
Escenario
Policiales
Cartas de lectores
Estilo
Mundo digital



suplementos
Ovación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 29/04
Mujer 29/04
Economía 29/04
Señales 29/04
Educación 28/04
Página Solidaria 25/04
Salud 18/04
Estilo 07/04

contacto
servicios
Institucional



 jueves, 03 de mayo de 2007  
El ex cine Gardel quedó otra vez vacío y busca un destino
La sala de Lagos y Córdoba fue de las más populares de la ciudad y dejó de funcionar en 1970

El local del popular cine Gardel (Ovidio Lagos y Córdoba) vuelve a ofrecerse en alquiler, pero a esta altura ya casi nadie abriga la ilusión de recuperarlo como sala. El agente inmobiliario a cargo de la operación, Walter Brumatti, fue uno de los escépticos: después de recordar que tras el cierre del Gardel en agosto de 1970 en el local funcionaron varios boliches y hasta un templo evangélico, contó que los actuales interesados en alquilarlo piensan en abrir una nueva confitería o -aún más prosaico- un supermercado. Y pese a que aún cuenta con su clásica estructura de cine, incluidas una sala de proyección y su bandeja para la platea alta.

Rosario supo ser pródiga en cines. Desde diciembre de 1898, cuando se abrió la primera sala, pasaron por la ciudad más de 160 "biógrafos" (sin contar los cambios de firma en cada lugar), buena parte de los cuales congregaron la vida social en los barrios.


Calle Plata
El Gardel por ejemplo tuvo su historia previa abrió como Café Cinematógrafo La Plata en la década de 1910 cuando Ovidio Lagos aún no se llamaba así sino justamente calle La Plata Tiempo después sumó grandes reformas como palcos para el numeroso público que ya albergaba

Años más tarde cambió su nombre por el de Salón Cine Teatro El Plata, con un anexo veraniego al aire libre para funciones nocturnas en Córdoba 2850, donde a los filmes se sumaban obras de teatro. Hacia 1923 la sala se mudó a Ovidio Lagos 790 y funcionó allí hasta el 27. Ese mismo año volvió a rebautizarse y pasó a llamarse Cine Teatro Edison, conservando su anexo al aire libre.

Recién en 1936, reforma total mediante, nació el cine Gardel. Durante casi 35 años la sala, que tenía 500 butacas, no dejó de incorporar todos los adelantos tecnológicos que iba sumando el séptimo arte, entre ellos, en 1955, la famosa "pantalla panorámica".

De las tres películas por tarde que en ese entonces veía en el Gardel se acuerda todavía Ricardo Pinea (63), criado en el barrio. "Habré tenido 10 o 12 años y con dos amiguitos japoneses, hijos del tintorero del Nuevo Nipón, pedíamos que nos dejaran entrar gratis", recordó.

La condición para el "sí" es toda una pintura de época: el encargado les pidió que cada lunes barrieran el cine "de arriba a abajo" para dejarlos entrar sin pagar los fines de semana. Al salir, en el bar de la esquina, los esperaba otra delicia: el remo con bai biscuí.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados