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 jueves, 03 de mayo de 2007  
El Irar y la educación

La educación es un derecho humano, así lo entendemos y por ello promovimos un programa educativo y cultural en contextos de encierro, dirigido a mayores privados de su libertad y a menores en conflicto con la ley penal. En este sentido, la ministra de Educación y el ministro de Gobierno formalizaron un convenio para la aplicación del mismo que fue aprobado por decreto Nº 2206/2006 del gobierno de la provincia de Santa Fe. En este marco, atienden en Irar la educación básica de los adolescentes que allí son derivados dos docentes. Una de las maestras pertenece a la planta de la Escuela Nº 2.513 de nuestra ciudad y otra docente depende del Programa de Alfabetización y Educación Básica para Adultos (Paeba). Dichas educadoras, que cuentan con la supervisión educativa correspondiente, más allá de los múltiples obstáculos que genera una institución con las características que son de público conocimiento, brindan la educación básica a estos chicos. Sin embargo, durante el año pasado y comienzos del presente, el desarrollo de las clases se vio obturado por cuestiones tales como la escasa concurrencia de los chicos a clases por razones poco claras y por tanto inaceptables, todo ello producto de la organización del Instituto y los numerosos conflictos de carácter laboral de sus empleados y la falta de celeridad para la solución pertinente. Estos docentes concurren a diario tres horas de lunes a viernes, no obstante, en una nota publicada en este diario se expresa que "no tienen más que una hora de clases dos días por semana y no todos". Es de esperar que con las nuevas medidas arbitradas para el mejoramiento de esta institución se tomen los recaudos necesarios para que nuestros docentes puedan cumplir con su función específica: brindar la escolaridad obligatoria, en el marco de una escuela más inclusiva, a los chicos de Irar, entendiendo que la educación además de ser un derecho humano inalienable, es un instrumento posible para mejorar la calidad de vida y abrir las puertas de un futuro más esperanzador para quienes la sociedad, de la que todos somos parte, tanto ha quitado.

Beatriz Mendiara (jefa del Departamento Educación de Adultos del Ministerio de Educación)


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