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 jueves, 01 de marzo de 2007  
ADN de tres amigos de María Marta y vigilador dieron negativo

Buenos Aires.- Una amiga de María Marta García Belsunce, un matrimonio vecino y un vigilador del country Carmel de Pilar quedaron descartados como sospechosos del asesinato de la socióloga.

El estudio de ADN al que se sometieron en diciembre pasado determinó que sus perfiles genéticos no coinciden con los de la sangre de dos hombres y una mujer a quienes María Marta alcanzó a lastimar antes de ser baleada, indicaron hoy fuentes judiciales.

Se trata de su amiga Nora Pichi Burgues de Taylor, el matrimonio, también amigo, Sergio y Viviana Binello, y del vigilador Norberto Glennon quienes, según determinó en las últimas horas la Asesoría Pericial de La Plata, no fueron las personas lastimadas con un atizador por María Marta antes de ser ejecutada.

Los resultados de ADN, que se esperaban para el inicio del juicio, se conocieron en coincidencia con la sexta audiencia del proceso oral que el Tribunal Oral en lo Criminal 6 de San Isidro sigue contra Carlos Carrascosa como presunto autor del crimen de su mujer.

En esta jornada, se leyeron detalles de la recolección de muestras de máculas de sangre que se efectuaron en una alfombra y en una pared de la casa y que permitieron que se hicieran exámenes comparativos a algunos sospechosos de intervenir en el crimen.

Los estudios determinaron que la mancha de la alfombra pertenece a una mujer que no es la víctima, otras dos a dos hombres y una tercera es una mezcla de sangre de dos o más personas de ambos sexos.

Otras muestras que se tomaron en un sillón, almohadones, una mancuerna de gimnasia, grifería del baño, trozos de mampostería, una lámpara, y un teléfono no sirvieron para efectuar comparaciones o no se trataba de sangre.

Con estos resultados ya son nueve los sospechosos cuyos perfiles genéticos no coinciden, ya que el ADN también les dio negativo a Carrascosa, al vecino Nicolás Pachelo -principal sospechoso de la familia-, a la masajista Beatriz Michelini, al vigilador José Alejandro Ortiz y a Gustavo Castro, un tucumano que se autoincriminó por televisión pero luego fue descartado.

Pichi Taylor era amiga íntima de María Marta y vecina, estuvo procesada por el encubrimiento, pero a fin del año pasado fue sobreseída en la causa; los Binello son un matrimonio también amigo del Carmel; y Glennon, un vigilador que el día del crimen, 27 de octubre de 2002, estuvo en la guardia del country.

El estudio había sido solicitado el 27 de diciembre último por los tres nuevos fiscales designados para el juicio, John Broyad, Jorge Ariel Apolo y Diego Grau, con la intención de tener nuevas pruebas para el debate.

En aquella oportunidad, los fiscales citaron no sólo a Pichi Taylor, a los Binello y a Glennon, sino también a los hermanos de la víctima, Horacio García Belsunce (h), John e Irene Hurtig, al cuñado Guillermo Bártoli y a la esposa de Pachelo, Inés Dávalos.

Ni los familiares directos de María Marta, ni Dávalos -que según la familia es la denominada “Dama de Rosa” que fue vista merodear el chalet del matrimonio Carrascosa el día del crimen-, se presentaron en la Asesoría Pericial.

Los familiares, desde la instrucción, se negaron sistemáticamente a sacarse sangre alegando “falta de garantías y objetividad” por parte del fiscal Molina Pico.

Sin embargo, fuentes judiciales indicaron que esta situación podría variar ya que los fiscales están intentado convencer a quienes se negaron a que se le extraiga ADN para compararlo con rastros de la escena del crimen, ofreciéndoles todas las garantías.

En tanto, el abogado Roberto Ribas, defensor de Pachelo, anunció hoy que estudian la posibilidad de denunciar a Carrascosa por calumnias e injurias, ya que ayer el viudo dijo ante el tribunal que sospechaba que este vecino, junto a vigiladores del Carmel, pudo haber asesinado a su esposa durante un robo.

Otra novedad que se produjo en la audiencia de hoy -la cual estuvo interrumpida durante cerca de media hora debido a las goteras en la sala por la fuerte lluvia- fue que Carrascosa relevó a su ex abogado Marcelo Nardi del “secreto profesional” que debe guardar y lo autorizó a declarar en el juicio como testigo.

A pedido de la presidenta del TOC 6, María Angélica Etcheverry, Carrascosa debió decir en voz alta que adoptaba esa decisión, para que quedara constancia en actas.

La defensa del viudo quiere que Nardi declare luego de que ayer se puso en duda que Carrascosa pidiera que se realizara una autopsia al cuerpo de su mujer antes de que lo hiciera el fiscal Diego Molina Pico.

Ese dato es de importancia para la estrategia de los abogados del acusado porque implicaría que no tuvo intención de encubrir el homicidio. (Télam)


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