Apartaron por prejuzgamiento al tribunal del caso Grassi

Buenos Aires.- El Tribunal Oral cuatro de Morón que debía juzgar al sacerdote Julio César Grassi por los delitos de corrupción agravada y abuso deshonesto fue apartado hoy del caso por la Cámara de Garantías, que hizo lugar a un pedido de los fiscales, quienes habían acusado a los juces de “prejuzgamiento”.

La medida abarca a los jueces Pedro Rodríguez, Carlos Torti y Rodolfo Castañares “por haber manifestado extrajudicialmente su opinión sobre puntos a decidir” en el marco de la causa contra el sacerdote, según consta en el fallo firmado por los camaristas de la Sala I de Morón.

“Se resuelve, por mayoría, hacer lugar a la recusación presentada por el Ministerio Público Fiscal respecto de los tres jueces del Tribunal Oral Criminal 4 en la causa 1422”, sostiene el texto de los camaristas Mario Moldes, María del Carmen Peña y Jorge Bourdieu.

En ese marco, la Sala I de la Cámara de Morón también decidió “realizar un nuevo sorteo para determinar” un nuevo Tribunal que continúe con la causa contra Grassi en la que está acusado de los delitos de corrupción agravada y abuso dehonesto.

Con este apartamiento, los tres camaristas respondieron al pedido de recusación realizado por la fiscal Sandra Míngolo, quien hace dos semanas, durante una audiencia, fundamentó este pedido en los dichos del juez Pedro Rodríguez quien “adelantó su opinión respecto a porque no había hecho lugar a una prueba contra el sacerdote”

Los fiscales recusaron a todos los miembros del Tribunal luego de que se conociera una pericia psicólogica efectuada a Grassi en agosto del año pasado, por orden del juzgado de instrucción de Santa Cruz, en una causa conexa con la de Morón, en la que el sacerdote está acusado de abuso sexual contra un chico identificado como “Luciano”.

En esa pericia, los profesionales concluyeron que Grassi posee el perfil de un delincuente sexual, con una conducta narcisista y un carácter impulsivo.

“Es una excelente señal, es una medida justa, ya que la parcialidad del tribunal fue evidente. Es una señal en términos de todo lo que vino pasando en la causa por lo que no hay lugar para más dilaciones”, dijo el abogado Juan Pablo Gallego, quien representa a uno de los chicos presuntamente abusados.

Indicó que el tribunal apartado “recibió la causa en noviembre del 2003 y en tres años no movió la causa, en febrero realizó una audiencia de prueba que se desarrolló en medio de enormes irregularidades que denuncié ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense”.

El abogado consideró además que ahora “la misma resolución que apartó a este tribunal dispone efectuar un sorteo para determinar los nuevos jueces de la causa quienes deberán resolver un pedido de nulidad realizado por la defensa de Grassi y otro pedido de la fiscalía que solicita la prisión del sacerdote”.

La fiscal Sandra Míngolo mencionó además, como causales de la recusación, la existencia de recientes actuaciones administrativas contra el tribunal que tramita la Oficina de Control Judicial de la Suprema Corte bonaerense donde también se cuestiona la posible parcialidas del tribunal ahora apartado.

Otro de los asuntos que expuso la fiscal tuvo que ver con el rechazo de nueve testigos “fundamentales para el esclarecimiento de los hechos” que realizó en febrero pasado el tribunal durante la audicencia preliminar.

También, la fiscal Mingolo recordó que el 17 de mayo el tribunal “resolvió autorizar a Grassi a no concurrir a la evaluación psiquiatrica” a pesar que se había previsto que “entre los días 12 al 15 de mayo pasado debía concretarse esa importante diligencia”.

El juicio oral contra el sacerdote había sido fijado para el 3 de julio pasado pero fue postergado primero para el 17 de ese mes y luego sin fecha por los continuos pedidos de nulidad presentados por ambas partas.

Grassi está acusado por abuso sexual contra dos menores de la Fundacion Felices Los Niños, que él dirigía, identificados por los seudóninos “Gabriel” y “Ezequiel”, mientras el juzgado de instrucción uno de Santa Cruz, tramita otra causa por abuso sexual contra otro menor identificado como “Luciano”.

La causa del padre Grassi se inició tras una investigación televisiva efectuada por una cámara oculta en octubre del 2002, pero el tribunal de Morón, en una polémica decisión, resolvió que el sacerdote tuviera una “prisión morigerada”, es decir fuera de la cárcel, hasta que comience el juicio oral. (Télam)