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 sábado, 22 de abril de 2006  
Miles de súbditos saludaron a la soberana británica en Windsor
La reina Isabel II festejó sus 80 años
Las celebraciones se extenderán hasta junio, cuando se realizará un desfile militar en su honor en Londres

Thomas Burmeister y Christoph Sator

Londres. - Hubo inmensas cantidades de flores, chocolate, pasteles y hasta un nuevo perro Corgui, eso sí, de porcelana. En su "baño de multitudes", la reina Isabel II recibió numerosos regalos, pero el "único deseo verdadero" de la soberana para su cumpleaños no se cumplió. Quería "un bonito día soleado" para sus 80 años, pero San Pedro no la oyó. Ayer fue un día fresco y nublado en la isla británica, aunque eso no perturbó el ánimo de las miles de personas que saludaron con júbilo a Isabel II en la pequeña ciudad provincial de Windsor.

Un mar de pequeñas Union Jack y banderas con la cruz roja de San Jorge sobre fondo blanco recibieron a la octogenaria soberana cuando salió ataviada con un traje de color fucsia furioso y un sombrero del mismo color a las puertas del castillo de Windsor para dar un paseo por la ciudad cercana a Londres. Llevaba además guantes negros de cuero y su infaltable bolso de mano en el brazo derecho.

Con 21 salvas, comenzó la ceremonia en Windsor, tras lo cual sonaron las campanas de las iglesias en todo el país. La banda militar del regimiento de los Irish Guards, guardia personal de la familia real en el casi milenario castillo de Windsor, tocó el "Happy Birthday".

En la gran torre, ondeaba el estandarte real, la bandera personal de la reina de colores oro, azul y rojo. Sólo para acontecimientos especiales es izada en este enorme formato de 5,80 por 11,69 metros. La última vez fue para la boda del heredero, el príncipe Carlos, y Camilla Parker Bowles, que tuvo lugar en el registro civil de Windsor. Aquel controvertido enlace se celebró hace más de un año, pero en el cumpleaños de la reina nadie quiso recordar en Windsor los malos momentos de la casa real. No está olvidado, pero sí perdonado, el hecho de que Isabel II no mostrara pesar en un primer momento tras la muerte de la princesa Diana en 1997.


Saludos a mamá
El príncipe Carlos se adaptó al ambiente emotivo de la jornada. Dijo que transmitiría a "mi mamá" por la noche en la cena familiar todos los saludos que recibió a lo largo del recorrido. Hace tiempo que el heredero no llamaba así a la reina.

El júbilo a lo largo de su recorrido por el centro de la ciudad, atravesando la Thames Street y llegando al Jubilee Arch, demostró que nadie más que Isabel II es la verdadera "reina de corazones" de Gran Bretaña. A sus 80 años, la reina vuelve a ser al menos tan popular como antes de la terrible crisis generada por la muerte de Diana. Los primeros partidarios de la monarquía ya habían llegado por la mañana, para asegurarse uno de los mejores lugares detrás de las vallas. Lo mismo hicieron los cámaras de todo el mundo para conseguir un buen ángulo desde el que transmitir en directo el "baño de multitudes" de la soberana.

Muchos turistas estaban casualmente allí, pero muchas otras personas aprovecharon conscientemente el evento para manifestar su apoyo a la monarquía y su fidelidad a la reina. "Nunca estuvo involucrada en un escándalo y cumplió sus obligaciones perfectamente", dijo Colin Edwards, de 65 años, oriundo de Gales, que sigue a la reina desde hace décadas. "Espero que alcance la edad de su madre y reine al menos otros veinte años".

Paul Ratcliffe de Leeds le preguntó a la soberana cuál era el secreto de su resistencia, a lo que ésta respondió modestamente: "No lo sé".

Con cortesía real, la reina siguió primero el cambio de guardia. Un poco más amable, aunque distante tal como lo establece el ceremonial, avanzó entre las filas de súbditos. Detrás, iba su esposo, el príncipe Felipe, que en junio cumple 85 años.

Una y otra vez, la reina recibía regalos, sobre todo, una inmensa cantidad de flores pero también un CD del grupo Arctic Monkeys, que le entregaron unos jóvenes admiradores. Los festejos por el 80 cumpleaños de la monarca británica proseguirán hasta junio, cuando se celebrará un desfile militar en Londres en su honor.

Pero no en todos los corazones británicos reinaba esta alegría. Las quejas de los republicanos también se oyeron para el 80 cumpleaños de la reina. (DPA)
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Isabel II recibe el afecto de los británicos.

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