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 miércoles, 07 de septiembre de 2005  
Los maestros públicos no dan tregua y van al paro mañana y pasado
El gobierno "descontará los días de huelga". Los docentes privados, en cambio, sí dictarán clases

Marcelo Carné-Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

La asamblea provincial de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) pateó sorpresivamente ayer el tablero y declaró un nuevo paro de 48 horas para mañana y pasado. Así, echó por tierra la firma de un acta abriendo la posibilidad de aceptar una tregua por 30 días que parecía sellada en horas del mediodía. En cambio, el sindicato que nuclea a los docentes privados, Sadop, acató esa impasse y se integrará a las negociaciones sin realizar medidas de fuerza. Con la decisión de Amsafé, los alumnos de las escuelas públicas santafesinas habrán perdido, al terminar este semana, 17 días de clases en lo que va del año a raíz de las huelgas, a los que se suman uno por capacitación docente y otro en el que las aulas estuvieron vacías a raíz de los trabajos de limpieza en la jornada posterior a las elecciones.

La confirmación del paro causó hondo malestar en la Casa Gris, al punto que un conspicuo funcionario santafesino lo calificó de "insólito" y anticipó anoche mismo a La Capital que "serán descontados" los días de huelga.

Lo cierto es que en el seno del gabinete de Jorge Obeid se mostraron contrariados con la huelga dispuesta por el sindicato que nuclea a los maestros públicos. Es que todo parecía indicar que el gobierno y las cúpulas gremiales habían consensuado la tregua para "analizar y acordar reformas en el régimen previsional provincial", firmando un compromiso al respecto, aunque los sindicalistas se encargaron de aclarar horas después que el acta "no implicaba ningún acuerdo".

Como contrapartida, a instancias de los funcionarios participantes, en el documento se había condicionado la vigencia de los puntos acordados a la suspensión del plan de lucha, aunque los sindicalistas habían dejado constancia que esa decisión sería tomada por sus respectivas asambleas.

Si bien los docentes privados aceptaron la tregua, el baldazo de agua fría para el gobierno lo tiró el sindicato que nuclea a los maestros públicos. Es que pasado el mediodía, todos habían firmado el acuerdo que, en el término de treinta días, contemplaba analizar textualmente lo siguiente: "reformas en el régimen previsional provincial que posibiliten mejoras en la base de cálculo y en la determinación del haber previsional, que permitan alcanzar un 82% con 35 años de servicio, con la movilidad prevista en el régimen vigente; analizar y acordar modificaciones al sistema previsional provincial que mejoren las condiciones de acceso al beneficio jubilatorio y haber jubilatorio vigentes para el sector docente; y proponer el establecimiento de un régimen legal que posibilite la creación de un ámbito de tratamiento de la situación laboral y salarial del sector".

Paralelamente, el acta dejó establecido un contrapunto, a instancias de los funcionarios, por el cual se condicionaron los compromisos asumidos "a la no adopción de medidas de fuerza por parte del sector docente", con lo que anoche al menos para la docencia estatal sus puntos habían perdido la vigencia de una propuesta oficial.

Los primeros en acatar la tregua acordada por la mañana entre la administración provincial y ambas cúpulas gremiales fueron los docentes privados. Según comentó al término de la asamblea provincial del Sadop su titular, Pedro Bayúgar, "el Congreso resolvió aceptar el compromiso del gobierno provincial de tratar durante 30 días un posible acuerdo sobre la futura ley previsional y la situación de los docentes en el marco jubilatorio. Asimismo -explicó el gremialista- se avaló nuestra participación en una comisión paritaria para analizar los temas salariales y laborales que cambien las reglas de juego sustancialmente y permitan dialogar y discutir en paridad las condiciones de trabajo".

Por la noche, una asamblea extraordinaria de los docentes oficiales cambió todo el panorama al decretar una huelga de 48 horas para mañana y pasado al considerar "insuficiente" la propuesta plasmada en el documento rubricado al mediodía en la Casa Gris, fundamentalmente en lo concerniente a la no contemplación de la rebaja de la edad jubilatoria para los docentes a 60 años para los varones y 55 para las mujeres.

Según consignó anoche la titular adjunta de Amsafé, Sonia Alesso, quien ofició de vocera luego de la agitada asamblea desarrollada en Santa Fe, una nueva asamblea convocada para el martes de la semana próxima resolverá la aceptación o el rechazo de la propuesta gubernamental.

La cúpula de Amsafé justificó la continuidad de las medidas de fuerza para la presente semana en lo votado previamente en las asambleas departamentales de base en las últimas 48 horas. "Esto es lo que han decidido los maestros de toda la provincia y, como siempre lo hemos planteado, esta comisión directiva no decide la aceptación ni el rechazo de ninguna propuesta sin que los docentes de todas las escuelas de la provincia la conozcan, la discutan y la voten", concluyó Alesso.
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Las aulas estarán desiertas por otras cuarenta y ocho horas.

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