Rugby: Los Pumas le ganaron el primer test match a Italia

No dejó demasiado margen para el elogio el triunfo conseguido ayer por Los Pumas, que, sin lucir, vencieron al seleccionado de Italia por 35-21 en el Estadio Padre Martearena de Salta. Si bien el equipo argentino fue superior al azzurro, no marcó las claras diferencias que existen entre uno y otro seleccionado.

Federico Todeschini, autor de 30 puntos (un try, dos conversiones y siete penales), fue la figura del elenco albiceleste que volverá a medirse con el representativo europeo el próximo viernes por la noche en el estadio de Belgrano de Córdoba.

Sólo en los primeros minutos el representativo argentino se vio comprometido por su rival. Italia sorprendió tomando la iniciativa en los primeros movimientos y sacó seis puntos de ventaja con un drop convertido por Griffen a los 30 segundos de juego y un penal de media cancha marcado por Peens.

Pero cuando Los Pumas lograron ubicarse en la cancha pudieron equilibrar las acciones, pese al fuerte viento en contra que tuvieron en esa primera parte. Bastó que el equipo argentino lograra desplegar el juego en campo contrario para que el marcador cambie de dueño en pocos minutos.

Un buen movimiento de izquierda a derecha derivó en el try de Lisandro Arbizu, quien apoyó sin problemas después de ser habilitado por Felipe Contepomi, quien segundos antes había quebrado la estructura defensiva rival.

Italia, aprovechando el factor climático, situó el juego en campo ajeno. Y complicó con su esquema desprolijo en el que cayeron los jugadores albicelestes, que, además, cometieron infinidad de infracciones, traducidas en tantos por Peens, quien puso a su equipo al frente nuevamente por 12-10 cuando promediaba el segmento.

A Los Pumas les faltó rapidez y claridad para resolver los reagrupamientos, y por ello les costó volver a meterse en el partido. Pero cuando lograron mover la pelota de un extremo a otro por segunda vez, liquidaron el parcial con un try bárbaro del Ninja Todeschini, quien se cortó hasta abajo de los postes después de recibir una asistencia bárbara de Lisandro Arbizu, en una jugada en la que fue fundamental el quiebre logrado por Leguizamón.


Con viento a favor
Después de llevarse el parcial por 17-15, y ahora con el viento como aliado, el equipo argentino fue el que manejó el desarrollo del encuentro. Pero se ofuscó en querer quebrar la estructura defensiva rival con los forwards como artistas principales. Y, aunque el pack italiano fue perdiendo fuerzas, pocas veces resultó quebrado por su par argentino.

Sólo cuando los conducidos por Loffreda lograron desplegar el juego complicaron al seleccionado visitante, pero ya fuera por imprecisiones en los últimos pases o por las infinitas infracciones cometidas por los italianos, no consiguieron visitar el ingoal adversario en una nueva oportunidad.

Debieron resignarse a sumar a través de las patadas del eficaz Todeschini, quien fue ampliando la brecha hasta sellar el resultado final sobre el tiempo adicional en un partido en el que Los Pumas ganaron con claridad, pero no brillaron.