Amenazas con armas contra un candidato

Villa Gobernador Gálvez.- El candidato a concejal por una de las líneas del justicialismo, Rodolfo Cavallieri, denunció que debió realizar una reunión partidaria con el apoyo del Comando Radioeléctrico después de que uno de sus acompañantes fue amenazado con un arma de fuego. El hecho quedó registrado en la comisaría 26ª de esta ciudad, con la intervención del Juzgado Correccional de la 8ª Nominación.

"Quieren volver a las internas bravas, al modo de hacer política que se daba años atrás", dijo Cavallieri cuando relató los hechos ocurridos mientras respondía a la invitación de un grupo de vecinos del denominado Sector Once.

Allí, y convocado por el dueño de una vivienda ubicada en la calle Balcarce, entre Magallanes y Rosario, el candidato a concejal tuvo que recurrir a la policía después de que un grupo de personas los intimaran para que abandonen el lugar bajo amenazas, según relató.

De acuerdo a trascendidos, los presuntos agresores insultaron a quienes estaban exponiendo los proyectos políticos y les dieron un plazo perentorio: cinco minutos para retirarse.

"Se presentó Juan Carlos Acosta, que no había sido invitado porque es uno de los punteros del diputado nacional Pedro González, y nos manifestó que nos retiráramos de ese domicilio porque el legislador manda en ese barrio, al tiempo que afirmó que si no me iba a pegar un tiro", relató ante la policía Eduardo Manuel Alomar, quien acotó que alcanzó a ver "que poseía un revólver grande, de color negro, en su mano derecha".


Fuera del equipo
Para poder continuar con la reunión los visitantes solicitaron protección policial, por lo que el encuentro terminó con un patrullero de custodia. Cavallieri presentó el pasado 31 de enero su renuncia al cargo de secretario de Gobierno de Villa Gobernador Gálvez, cuando aseguró: "Estoy fuera del equipo de Pedro González".

En ese momento acotó que en su gestión no pocas veces se tomaron decisiones sin ser consultado. "Creí que formaba parte de un equipo de gobierno, pero no me sentí respetado", dijo a La Capital, y agregó que a pesar de lo sorpresivo de su renuncia había recibido el apoyo inmediato de la gente. "El teléfono de mi casa y de mi farmacia no paró de sonar. No me siento mal, estoy muy bien y muy tranquilo", explicó entonces, aunque admitió que el paso dado había sido difícil y de análisis arduo.