Año CXXXVIII Nº 48745
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Escenario
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 08/05
Mujer 08/05
Economía 08/05
Señales 08/05
Educación 07/05
Salud 04/05
Autos 04/05

contacto

servicios
Institucional

 jueves, 12 de mayo de 2005  
Pesadilla de dos albañiles en una comisaría
Tras un incidente de tránsito con un policía, fueron detenidos y golpeados en la 11ª

Dos albañiles padecieron un calvario después de protagonizar un incidente de tránsito menor con un agente de la policía rosarina. El efectivo los hizo apresar bajo la acusación de un delito que no habían cometido: les dijo a los integrantes de una patrulla que los trabajadores intentaron robarle la moto en la que viajaba por la zona sur de la ciudad. La odisea no terminó allí. Los albañiles fueron llevados a una comisaría, donde los golpearon con ferocidad y les inventaron una causa para justificar el arresto. Ayer, un juez de Instrucción ordenó que salieran en libertad después de estar tres días presos y detectar que el sumario policial era fabricado.

Hugo y Oscar Barreto son hermanos. Hugo tiene 34 años y Oscar 25. Los dos se ganan la vida trabajando como albañiles. En la tardecita del lunes regresaban a su casa del Barrio de la Carne después de trabajar en la remodelación de una vivienda de Echesortu. Ya habían llegado con sus bicicletas al cruce de Ayacucho y Olegario Víctor Andrade cuando se toparon con un motociclista. El que conducía la moto Garelli 50 era un policía del Comando Radioeléctrico de Villa Gobernador Gálvez. "Los pibes lo rozaron (al uniformado) con la bicicleta. Discutieron y entonces el policía se bajó, extrajo su arma reglamentaria y tiró cuatro tiros", contó una fuente de la investigación.

Dos de los proyectiles rozaron las piernas de los Barreto y otros dos fueron "al aire". Cuando el incidente ya había terminado, un móvil de la Patrulla Urbana llegó al lugar. En ese momento se consumó la primera situación anómala en el procedimiento: "El policía les dijo a sus colegas que los albañiles habían intentado robarle la moto amenazándolo con un palo", explicó el vocero.

El relato del uniformado bastó para que los Barreto fueran llevados detenidos a la seccional 11ª. En la comisaría vivieron una pesadilla. A los dos los molieron a golpes. "A Hugo le quedó la cara destrozada. Tiene un hematoma en la frente", contó Adolfo, hermano de los albañiles.


Un dato llamativo
Durante la detención, los policías constataron que los Barreto no tenían prontuario abierto. Ese dato llamó la atención del juez de Instrucción Juan José Pazos. "Uno de los detenidos tiene 34 años y no tiene antecedentes penales. Me llama la atención que haya cometido un delito", razonó.

Sin embargo, Pazos decidió que continúen detenidos hasta su indagatoria en el tribunal. Ya para entonces habían sido imputados de tentativa de robo, lesiones, resistencia a la autoridad y amenazas. El sumario se había elaborado teniendo en cuenta el acta de procedimiento de la Patrulla Urbana.

Ayer a la mañana, los Barreto estuvieron frente al juez. Lo primero que le llamó la atención al magistrado fue el rostro deformado de Hugo. Le preguntó que le había pasado y el albañil respondió "que se había caído". Después entre sollozos relató la odisea que había sufrido. Sin disimular el miedo que lo atravesaba, contó la golpiza a la que lo habían sometido junto a su hermano.

Ayer Pazos dispuso que los Barreto fueran excarcelados y anoche ya estaban en su casa de la zona sur. No fue la única resolución que adoptó. Le encomendó a las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) que iniciaran la investigación del caso. Por eso, junto a agentes de Asuntos Internos secuestraron el libro de guardia de la seccional 11ª y la moto del policía. "Esto es un escándalo. Van a terminar varios policías presos", dijo un uniformado a cargo de la pesquisa.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados