Colón: Darras se disculpó por su exabrupto

Envió un documento a su par de Unión para bajar la tensión entre ambos clubes

En un documento que se hizo público ayer, el presidente de Colón, Horacio Darras, reconoció su error por haber pedido un minuto de silencio para el club Unión y pidió ayer disculpas al titular tatengue, José Citroni. Paralelamente, se supo oficialmente que ambos dirigentes se reunirán el próximo lunes en el municipio santafesino, en un intento del intendente Martín Balbarrey por ajar la tensión entre ambas entidades.

Hace dos días, las escenas televisivas del fallido episodio en el que el presidente sabalero aparece pidiendo un minuto de silencio para "el Tate que está muerto", recorrieron los canales nacionales y de todo el país, e incluso alcanzaron una mayor dimensión que el brillo que tuvieron los festejos.

Lo cierto que es el presidente de Colón, frente a la ineficacia de un pedido de disculpas que había realizado en una emisora capitalina, decidió tomar el toro por las astas y remitió un elocuente documento que inmediatamente tomó estado público, en el cual solicita "mis sinceras disculpas por expresiones realizadas en momentos muy emotivos con un entorno que supera muchas veces la razón".

"Sepan comprender -sigue la nota- que es un acto de tremenda responsabilidad social actuar con la celeridad necesaria para evitar confrontaciones estériles en la sociedad santafesina a la cual pertenecemos y queremos profundamente".

Muy expresivamente señala luego que su interpretación de lo sucedido "es entender que en este ámbito del fútbol nadie está exento de cometer algún exabrupto y la historia en la ciudad de Santa Fe así lo indica", agregando que frente a la reflexión por lo sucedido "invito a convivir comprometido con nuestras pasiones en un marco de consideración y de respeto".

El documento se conoció luego de que desde en ámbitos municipales se supo sobre un encuentro en ese lugar, entre ambos presidentes, gracias a la intervención como mediador del intendente santafesino Martín Balbarrey, en un intento por bajar los decibeles a la crisis planteada entre ambas instituciones luego los festejos rojinegros por su centenario aniversario.