Duhalde ahora admite que se equivocó cuando respaldó a Solá

El líder bonaerense ratificó su apoyo al presidente. Chiche lanzó Lealtad Peronista con vista a las internas partidarias

Eduardo Duhalde dijo ayer estar decepcionado con el gobernador bonaerense, Felipe Solá, y admitió que "no" acertó cuando lo eligió como uno de los renovadores de la política, aunque confió en que el mandatario provincial "en algún momento se dé cuenta de que se equivocó" al lanzar su línea interna e "intentar una ruptura en el justicialismo".

El líder del PJ bonaerense ratificó luego su "apoyo incondicional" Néstor Kirchner y ratificó su aval a una eventual reelección si el primer mandatario "sigue trabajando como lo está haciendo".

Paralelamente, su mujer, Hilda Chiche González, encabezó el lanzamiento de la agrupación Lealtad Peronista para disputarle la interna a Solá, con vistas a las elecciones legislativas de octubre.

En el mitin, realizado en la localidad de Caseros, Chiche le recomendó a Solá que no tenga "miedo" ni "actitudes histéricas", y subrayó que le exigirá una "buena gestión" en la administración provincial.

La diputada nacional lo desafió luego a que "ponga fecha de internas" y le advirtió que su sector llegó al límite de la "paciencia". "En los temas políticos vamos a enfrentarnos" con Solá, adelantó Chiche, y descerrajó: "Le vamos a enseñar al gobernador cuántos pares son tres botas".

En un breve contacto con la prensa, Chiche negó luego que la disputa con el felipismo preanuncie la ruptura del PJ en la provincia, e insistió en que el tema se resolverá "en las internas".

Por su parte, Duhalde -máximo jefe político del PJ bonaerense- reiteró que no se presentará a ningún cargo electivo y desmintió versiones que hablaban de su supuesto apoyo al ministro de Economía, Roberto Lavagna, como sucesor de Kirchner en el 2007.

"Los que dicen eso no saben como funciona el justicialismo", enfatizó, y reiteró su postura de impulsar "una renovación generacional, de caras e ideas" en el justicialismo. "Por eso lo elegimos a Kirchner y a Solá, pero acertamos en uno y no acertamos en otro", dijo para remarcar las diferencias en la relación con ambos dirigentes.

Duhalde calificó como "macanas" los supuesto enfrentamiento político con Kirchner por las candidaturas en Buenos Aires y pronosticó que si el presidente "si sigue trabajando como lo está haciendo, será reelecto en el 2007 por más diferencia que en la primer elección".