El ex mandatario minimizó el llamado al diálogo y criticó a la líder del ARI y al presidente norteamericano

Duhalde: "Carrió es una mala persona que miente e injuria descaradamente"

Desde Venezuela, donde será veedor del plebiscito, también le recomendó que se reconcilie con su marido

Eduardo Duhalde le recomendó ayer a Elisa Carrió que "se reconcilie con el esposo", la consideró una "mala persona" y la acusó de "injuriar permanentemente" y "mentir en forma descarada". Con estas durísimas expresiones el ex presidente le respondió a la jefa del ARI, quien había ironizado que antes de sentarse a dialogar con el líder del PJ bonaerense o con el diputado radical Leopoldo Moreau prefería volver junto a ex marido.

Desde Venezuela, donde será veedor por el Mercosur del referéndum de mañana, Duhalde también se despachó contra el presidente de EEUU, George Bush, al acusarlo de haberse "portado muy mal" con Argentina y consideró "conveniente" un triunfo del jefe de Estado venezolano, Hugo Chávez, en el plebiscito de mañana.

Duhalde relativizó el llamado al diálogo político del gobierno al señalar que el tema "no ha salido de boca" del presidente Néstor Kirchner. Luego ratificó su intención de tomar distancia de la política local y comentó que si bien con su sucesor se comunicó "por teléfono, personalmente no he hablado (con él) en los últimos tiempos".

"En realidad estoy muy poco en la Argentina", argumentó, tras confirmar su propósito de "meter la nariz lo menos (posible) en la política interna porque es una etapa que ya dejé atrás".

Consultado sobre Carrió, una de las más duras críticas tanto del actual gobierno como de la gestión anterior, sostuvo que para relacionarse con las personas primero establece si son buenas o malas, y la ex diputada chaqueña -consideró- "es una mala persona". Luego le imputó que acostumbra a "injuriar permanentemente" y a "mentir en forma descarada", para finalmente devolverse la estocada: "Esa señora, mejor que se reconcilie con el esposo".

Al relativizar el llamado del Ejecutivo al diálogo político, el bonaerense interpretó que, más que una convocatoria del presidente, son "dimes y diretes que algún ministro" deslizó. "Yo convoqué al diálogo el mismo día que asumí para quienes quisieran participar, pero son momentos históricos distintos", recordó.

Duhalde cuestionó a Juan Carlos Blumberg por la férrea oposición que ejerció para que no fuera nombrada María del Carmen Falbo como procuradora general de la Suprema Corte bonaerense.

Falbo "es una persona de primera. Creo que Blumberg se equivocó, estuvo mal asesorado", opinó. "Por primera vez en la historia una procuradora es elegida por unanimidad, desde el ARI hasta todos los partidos de derecha e izquierda. Ella era presidente del Colegio de Abogados, no participaba de la política, ni siquiera era afiliada del justicialismo", precisó en defensa de la funcionaria.

Duhalde tampoco ocultó su malestar con el presidente estadounidense: "No tengo ninguna duda de que Bush se ha portado muy mal con Argentina; se lo he referido al canciller", Colin Powell.

Según el ex presidente, en 2002, en plena crisis y cuando él se encontraba a cargo de la Casa Rosada, "hubo un maltrato respecto de Argentina y un olvido respecto de la región", por parte de EEUU. Sin embargo, diferenció al actual mandatario norteamericano de la gestión de su padre y de su sucesor, Bill Clinton, al destacar que fue "distinto" y "respetuoso" el trato dispensado por ambos hacia el país.

"En el caso nuestro, ha sido humillante", dijo Duhalde. Luego consideró "conveniente" un eventual triunfo del mandatario venezolano, ya que -explicó- "si gana, le quedan nada más que dos años" al frente del gobierno, "tiempo que la oposición necesitará para organizarse y tener un liderazgo".

Señaló que entre los opositores "hay graves divergencias" y se preguntó: "No sé si para la continuidad democrática no sería conveniente que Chávez continúe dos años" más. Luego recordó que Chávez, "de perder, tendría una elección nuevamente en 30 días, en una situación muy conflictiva", y advirtió que "acá hay una idea de que se puede caer en una anarquía nuevamente, porque no hay una oposición organizada".

Duhalde consideró que la consulta popular de mañana es "un acontecimiento histórico" que pone "a prueba el sistema democrático en Venezuela, país que en febrero de 2002 estuvo a punto de sufrir un golpe de Estado".

Duhalde no ahorró munición para responder a una ironía de Carrió.