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 domingo, 16 de mayo de 2004

Las causas del empate
De cómo no saber defenderse
Ñuls terminó con 8 jugadores de marca

La discusión durará unos cuantos días. ¿Otra vez le faltó arrojo a Newell's para sacar un resultado importante? ¿Nuevamente Gallego tiró el equipo para atrás con los cambios? Ni tanto, ni tan poco.

Es muy probable que la sensación que haya quedado es que el técnico pecó de temeroso, sobre todo cuando Leandro Fernández reemplazó a Patiño. Pero si se lo compara con el encuentro ante Boca, la variante adquiere mucha lógica. Es que anoche Newell's estaba ganando el partido y no encontraba la vuelta para contener los últimos lances de un desesperado Racing.

Los ingresos de Iriarte por Belluschi y de Morales por Silvani también responden a una cuestión táctica que se condice con el desarrollo del juego. Pero es insoslayable, los cambios fueron defensivos: Gallego tiró el equipo para atrás.

Pero ese no es el peor pecado, el déficit más importante está en que ni siquiera así los rojinegros supieron contener a su adversario que pasados los 30' del complemento sólo respondía a los mandatos de la desesperación.

Sin eufemismos, Newell's terminó acorralado contra Palos con 6 defensores de profesión, adentro de la cancha. Eso y resignar casi todo es más o menos lo mismo. Si el análisis pretendiera ser exquisito o puntilloso, se debería preguntar cómo es que Newell's no pudo ganar un partido con tanta gente metida exclusivamente para defender a su arquero.

El Chavo Ruiz, Gastón Aguirre, Sebastián Domínguez, Luciano Vella, Hugo Iriarte y Leo Fernández conformaron una inédita línea de seis que sólo se deformó cuando Iriarte, en un par de ocasiones, se puso la camiseta del carrilero y llegó a posiciones ofensivas. Se debe agregar que Ariel Zapata, como si no fuese suficiente con el resto, terminó jugando metido contra sus centrales.

Si al capitán se le suma a Palos, los rojinegros terminaron con 8 defensores, dos enganches y un delantero.

No es un pecado defenderse, es preocupante no saber hacerlo. Casi nunca la cantidad significa calidad.

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Aguirre y Palos, dos de los muchos que intentaron evitar el empate.

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