Un festejo que invadió las calles

Millones de sudafricanos se lanzaron ayer a las calles para celebrar la elección de su país como sede del Mundial de fútbol 2010, un sueño hecho realidad para una nación que hace seis años sufrió una fuerte frustración al perder ante Alemania la organización del torneo de 2006.

"¡Estoy tan entusiasmado! Esto es decirle al mundo que podemos albergar algo grande, algo tan grande como un Mundial. Esto muestra confianza en Sudáfrica", dijo Paul Cloete, un ciudadano que al igual que millones de compatriotas estalló de alegría.

Muchos sudafricanos se habían reunido en las horas previas en las calles de las ciudades y en diferentes instalaciones para seguir por televisores y pantallas gigantes el anuncio transmitido en vivo por las cadenas públicas y privadas desde la sede de la Fifa en Zurich. "Esto es un sueño, esperamos tanto tiempo...", aseveró Moses Ramasedi, otro ciudadano que no podía reprimir su alegría al conocer la decisión.

Sudáfrica es un país situado en el Cabo de Buena Esperanza, tiene una superficie de 1.221.037 kilómetros cuadrados y una población aproximada de 44.759.000 habitantes. Su capital es Pretoria, su moneda es el Rand y tiene 11 idiomas reconocidos.

Las calles de Johannesburgo fueron copadas por los sudafricanos apenas se conoció la elección.