Condenan a mutiladores de niños en Brasil

Dos integrantes de una secta fueron culpados por castrar a menores en ritos satánicos entre 1989 y 1993

Dos integrantes de una secta satánica que secuestró y castró a varios niños en Brasil fueron condenados a penas de 57 y 35 años de prisión, diez años después del episodio que causó conmoción nacional. El comerciante Amailton Madeira Gomes y el ex policía Carlos Alberto dos Santos fueron hallados responsables de los ritos satánicos practicados entre 1989 y 1993 en Altamira, municipio del nordestino estado de Pará.

Todas la víctimas fueron niños que tenían entre 8 y 14 años y los crímenes están relacionados con rituales de magia negra, de acuerdo a la conclusión del proceso.

En total son cinco los acusados, pero aún restan las sentencias contra Valentina de Andrade, supuesta líder de la secta, y contra los médicos Cesio Flavio Caldas y Anisio Ferreira de Souza, quienes recibirán condena la próxima semana.

Valentina de Andrade, que de acuerdo a los abogados acusadores es líder de la secta Lineamento Universal Superior (LUS) que supuestamente tiene su sede en Argentina, fue señalada por la policía como principal responsable por la desaparición de un niño y el asesinato de otro en el estado de Paraná en 1992.


Seis muertes
De las nueve víctimas que cayeron en manos de la secta, en total murieron seis, mientras que tres lograron sobrevivir a los crueles ritos. De acuerdo a las pericias policiales los genitales de los niños fueron extraídos con instrumentos quirúrgicos usados por los dos médicos acusados.

Los crímenes habrían sido inspirados en la secta, por Valentina de Andrade, juntamente con los médicos Césio Brandao y Anísio Ferreira.

La secta, según el libro "Dios, la gran farsa", escrito por Valentina Andrade, que mezcla ufología (objetos voladores no identificados) con ataques a todas las religiones, asegura que los niños son "instrumentos inconscientes de la gran farsa denominada Dios y son sus nefastos colaboradores" y que, por eso, deben desaparecer. La subfiscal general Eliane Menezes de Farias, afirmó haber "visto y oido cosas escabrosas" durante el juicio. (Télam-SNI)