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miércoles,
14 de
noviembre de
2007 |
Por un paro, se complica el abastecimiento de garrafas
El conflicto entre los empleados y las cámaras del sector del gas provocó faltantes
Clarisa Ercolano / La Capital
Por efecto del paro nacional que decretó la Federación Argentina Sindical del Petróleo y Gas Privado (Faspygp), en los principales centros urbanos de la provincia el desabastecimiento de garrafas ya comenzó a ser evidente. Las dificultades se extienden al acceso de la denominada garrafa social, destinada a sectores de bajos recursos y también a comedores comunitarios o los que dan copa de leche.
Desde la distribuidora rosarina Italgás, la única de Rosario que expende la garrafa social, señalaron que ayer atendieron las demandas de unas 200 personas para hacerse del combustible y explicaron los problemas que tienen para abastecerla.
“Se está complicando el reparto, una cantidad de gente que vino a pedir la garrafa se retiró con las manos vacías y tememos que hoy se registren inconvenientes porque estaban desesperados, no tienen otra forma de suministro”, confió a este diario un vocero de la firma.
“No se vende gas envasado en garrafas o tubos en ninguno de los comercios del ramo, las plantas fraccionadoras y depósitos de distribución tampoco están trabajando”, confirmó por su parte el secretario adjunto del sindicato departamental, Daniel Quarín. La medida de fuerza tuvo su origen en una recomposición salarial exigida por los trabajadores.
Plus por inflación. Si bien el gremio había pautado con el gobierno una suba en sus haberes del 16,5 por ciento, los trabajadores dicen que ese acuerdo, firmado en abril, quedó desactualizado en relación a los constantes incrementos de precios. “La recomposición que reclama el sector también tiene que ver con que en las cámaras del sur del país lograron mejores acuerdos, que estipulan 25 pesos de plus salarial por día trabajado más una suma no remunerativa divida en tres etapas, de 500 pesos cada una”.
Según graficó Quarín, tras una semana de paro las cámaras todavía no dieron ninguna respuesta positiva con el argumento de que al estar congelado el precio de la garrafa no pueden implementar ningún aumento salarial.
“No queremos perjudicar al usuario de gas envasado, que por lo general es el de menores recursos”, explicaron los sindicalistas pero también dieron a entender que “ésta era la única salida que nos quedaba”. Hoy esperan una nueva instancia de negociación.
Si bien las empresas productoras de hidrocarburos aseguraron que no se verá afectada la producción de gas natural, al menos en lo inmediato la falta de garrafas es evidente, no sólo para los sectores más carecientes sino también para numerosos pueblos de la provincia donde no llegan las redes de gas natural. “Esto se agrava o se arregla”, sintetizó finalmente el dirigente gremial.
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