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sábado,
29 de
septiembre de
2007 |
“Nadie puede saber cómo seguirá esta
historia”
“Puedo decir cómo está hoy la nena: estable, con una leve mejoría, pero no puedo decir cómo estará cuando se le dé el alta. Socialmente es un caso muy serio, nadie sabe cómo seguirá su historia”. Las palabras pertenecen a la directora del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, Karen Liljesthröm, quien ayer le dio a La Capital el parte médico de María, la niña de 12 años, internada desde el 14 de septiembre pasado tras haber inhalado pegamento y consumido cocaína y pastillas.
El caso de la nena, el más grave en materia de adicciones que Liljesthröm reconoce en un paciente del hospital, obligó a hacer reuniones de médicos y funcionarios de distintas áreas del municipio. “Es que este episodio es grave desde donde se lo mire”, señaló la profesional.
El hígado de María está muy dañado. “Como se detectó una leve mejoría podríamos decir que se ha salvado de un trasplante, pero tendrá por lo menos una semana o más de internación”, indicó la médica. “¿Y después?”, le preguntó este diario a Liljesthröm. “Acá hay una hermana sustituta y un padre, con serios problemas sociales, habrá que ver cómo sigue la historia”, dijo.
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