Aplican en Rosario un novedoso concepto en implante dental

Gracias a un software especial se reduce el tiempo de la cirugía y no se necesita incisión

La implantología dental tiene motivos para celebrar. El avance del diagnóstico por imágenes y de la microcirugía permiten hoy que una persona se realice en una misma sesión varios implantes dentales, con pocas molestias, y se vaya a su casa con los dientes definitivos colocados. Además, en Rosario ya se ofrece una cirugía sin incisiones. ¿Cómo? Gracias al desarrollo de un sistema de planificación e implementación quirúrgica que permite al odontólogo “operar” previamente al paciente de manera virtual mediante un software especial y luego realizar la intervención real con una precisión sin precedentes.



Sin cortes. Una vez que el profesional tiene el modelo terminado en la pantalla de una computadora se fabrica una guía quirúrgica (una especie de molde) que se colocará en la boca del paciente al momento de la intervención. Esta guía quirúrgica tiene los orificios por dónde se debe colocar el implante, lo que le permite al odontólogo contar con la información exacta para saber cuál es el mejor lugar para insertar el implante. De esta forma se evita cortar la encía -como se hace habitualmente- y sólo se realiza un “agujerito” de pocos milímetros por donde ingresa la prótesis.

   “Los implantes convencionales requieren un período de oseointegración que suele durar unos 3 meses o más, y en ese tiempo no se puede cargar ninguna pieza con lo cual el paciente tiene que estar, literalmente, sin el diente. Con los nuevos implantes, el diente definitivo se puede colocar de inmediato. Además, con este sistema novedoso (Nobel Guide) que acabamos de incorporar podemos trabajar de forma mini invasiva, sin incisión, disminuyendo notablemente el dolor y la inflamación en comparación con los tratamientos convencionales y con una exactitud notable”, explicó la odontóloga Natalia Contigiani, integrante de la clínica rosarina donde se realizaron las dos primeras intervenciones con este novedoso método.

   

Tres dimensiones. Esto que parece ciencia ficción tiene su explicación. En una primera etapa, el odontólogo, basándose en una tomografía, “trabaja” sobre la boca del paciente en una computadora que permite ver en tres dimensiones. “Gracias a un software podemos navegar por los huesos maxilares y elegir con una exactitud sin precedentes la posición más conveniente del implante. Luego esa información es enviada on line a la casa central de Nobel Biocare en Suecia y ellos fabrican una guía quirúrgica en base a las imágenes que les enviamos. Días después recibimos la guía y a partir de allí se realiza un molde perfecto donde están determinados los lugares por dónde ingresará el implante. Ese molde se coloca en el paciente en el momento de la cirugía, lo que permite minimizar al máximo la posibilidad de error”, detalló la especialista.

   “El paciente gana en seguridad, rapidez y comodidad y nosotros como profesionales también nos vemos favorecidos porque llegamos a la cirugía con la certeza de lo que vamos a hacer”, agregó el profesor y doctor Angel Contigiani, uno de los pioneros de la implantología en la ciudad.

   Por su parte, Maia Contigiani destacó que “no sólo importan la técnica de colocación y el planeamiento quirúrgico sino también el tipo de implantes que usa el sistema, que permiten la función inmediata ya que por sus características no necesitan el período de cicatrización habitual”.

   Los odontólogos se refirieron a esta nueva forma de implantología dental como un hecho revolucionario ya que hasta ahora a los implantes se los asociaba con procedimientos prolongados, dolorosos y complejos, mientras que con este sistema “todo se simplifica notablemente”.

La utilización del sistema o concepto Nobel Guide implica un costo económico extra que “no tiene un impacto importante en el monto final”, señalaron. “Para muchos significa un menor costo porque el hecho de tener que pasar por un posoperatorio y perder días de trabajo resulta finalmente más costoso”, destacó Angel Contigiani.

Maia, Natalia y Angel Contigiani en el consultorio. Ya hicieron dos intervenciones con el nuevo sistema de implantes.