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miércoles,
26 de
septiembre de
2007 |
La chica que abortó en Mar del Plata fue trasladada a Paraná
Buenos Aires.- La joven discapacitada entrerriana que fue sometida el sábado a un aborto terapéutico en Mar del Plata fue dada de alta hoy y el ministro de Salud bonaerense, Claudio Mate, la trasladó en un avión sanitario bonaerense hacia Paraná.
Fuentes del gobierno de la provincia de Buenos Aires revelaron que el funcionario llevó a la joven y a su madre de regreso a Entre Ríos junto con muestras genéticas extraídas al feto para que la justicia pueda identificar al autor de la violación que provocó el embarazo.
A su vez, el gobierno de Entre Ríos realizó esta noche un operativo con discreción, ya que la llegada de la joven coincidía con una marcha antiabortista en Paraná y dispuso una guardia policial en la vivienda familiar.
La joven de 19 años con discapacidad fue sometida al aborto porque el embarazo que llevó adelante durante los últimos cuatro meses había sido producto de una violación, situación tipificada como no punible por el Código Penal para los profesionales que practiquen la interrupción de la gestación.
La intervención se realizó el sábado en el hospital materno infantil de Mar del Plata por intermediación de autoridades nacionales, luego de que médicos de Paraná se negaron a hacer la práctica.
El caso generó gran polémica en Entre Ríos, donde grupos antiabortistas cuestionan al gobierno por facilitar la intervención mientras organismos defensores de los derechos humanos critican a la Justicia que intentó frenar el aborto.
En ese marco, grupos defensores de la familia que se pronuncian contra el aborto marcharon esta noche en Paraná hasta la sede de los Tribunales para repudiar la intervención practicada a la joven y reclamar el respeto por la vida.
Asimismo, grupos antiabortistas porteños protagonizaron por la tarde una manifestación frente al Congreso nacional a la que llamaron “Marcha de los escarpines”.
El Secretariado Nacional para la Familia de la Conferencia Episcopal Argentina emitió hoy un comunicado en el que reiteró sus críticas a los gobiernos que facilitaron la realización del aborto al señalar que “cuando quien mata es el gobierno, pierde toda credibilidad y también muere la democracia”.
Los manifestantes entrerrianos se concentraron en la plaza Alberdi y marcharon en silencio hacia Tribunales para expresar, según dijeron, su “dolor por el asesinato de un inocente”.
En ese tono se pronunció el arzobispo de Paraná, Mario Maulión, quien expresó ayer tristeza ante el acontecimiento porque, dijo, “no deja de ser un asesinato fríamente premeditado”. (DyN)
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