El Politécnico celebra 101 años y ya debate un nuevo plan de estudios

Rodolfo Montes / La Capital

Pieza clave en el relato de la rosarinidad, dueño de un descomunal capital simbólico y amado de por vida por ex alumnos, el mítico colegio Politécnico de Ayacucho y Pellegrini cumplirá 101 años este miércoles. A modo de vigilia, mañana a las 21 lo celebrará con un nuevo “taburetazo”, masivo y festivo, pero también crítico: la Asociación de Ex Alumnos, gestora del “taburetazo”, promueve, a su vez, reencauzar el perfil del Poli para que vuelva al formato “técnico secundario”.

   Los que fueron polipibes, ahora ex alumnos, impulsan una juntada de firmas “por la vuelta de la educación técnica al ciclo secundario del Politécnico, eliminada del programa educativo desde la irrupción del EGB polimodal”.

   “Defendemos la educación pública, gratuita y de excelencia. Nos parece fundamental que el Politécnico vuelva a ofrecer una formación técnica durante el ciclo secundario, que además de proporcionar al estudiante un título profesional e inmediatas salidas laborales, el pensamiento lógico y el razonamiento matemático; también brinde una capacidad analítica que pueda aplicarse a todas las disciplinas de la vida”, ratificó Juan Pablo Busleiman, egresado de 1977 y fogonero de la idea.



El debate. El Politécnico, en el marco de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), de quién depende, abrió en estos días —y lo hará durante un todo un año— un debate por lo contenidos y los planes de estudio que aplicará el colegio hacia el futuro.

   Liliana Lagreca de Cattaneo, profesora de matemáticas con más de 35 años en el colegio y hoy máxima autoridad del Poli, participa de ese debate y anticipó a La Capital : “Vamos a tomarnos todo un año para encontrar lo mejor para el colegio. El debate debe ser sincero y completo, yo creo en la formación técnica, en mantener ese perfil, pero también hay que sincerarse: la enorme mayoría de chicos que llegan al Poli lo hacen pensando en seguir luego en la universidad”.

   “La Cattaneo”, como la conocen miles de rosarinos que cursaron la secundaria en el Poli —incluido quién escribe éstas líneas— se ubica en el sitio de máximo prestigio docente en ciencias básicas de la Argentina. “No soy anti técnicos, aunque no estamos seguros si es mejor un sistema de 6 años directos de formación técnica —sistema que funcionó hasta el año 1968—, un sistema de 5 años ( bachiller técnico) + 2 años de formación técnica o continuar con el esquema actual, donde rige una tecnicatura “superior” que insume tres años, luego del ciclo secundario.

   Pero por el lado docente hay otras voces, autorizada con más de 30 años en el colegio. Pedro Jáuregui, actual subjefe de talleres del Poli, se inclina por una rápida restitución de la formación técnica con salida laboral para los chicos. “Tenemos la obligación de formar chicos que salgan de aquí con una competencia laboral inmediata, que estén habilitados para ingresar al mundo del trabajo. Ese es el orgullo, la personalidad de la escuela”, le dijo a La Capital.



En línea. Para Jáuregui, la orientación técnica del Poli debe ir en línea con la necesidad del país, con una línea rectora que debe partir del Estado. “No podemos quedar en manos de las modas pasajeras que imponen ciertos sectores sociales de elite intelectual, las clases acomodadas. Hoy eligen el Poli, después van a otra actividad, y mañana ni se acuerdan de este colegio. No es así, el Estado debe orientar su oferta, su perfil, y eso no impide la libre elección de nadie. Pero la lógica no es que las modas de las elites terminen imponiendo el contenido educativo del colegio, es al revés”, advirtió Jáuregui.

   A un año de la celebración del centenario, el Poli sigue celebrando, pero empezó a discutir su perfil futuro. Una discusión, si se quiere, política. La pregunta ¿qué Politécnico queremos?, equivale a preguntarse ¿qué ciudad y qué país queremos?. l