Ahora se cree que tiraron el cuerpo de Madeleine al mar

La policía sospecha que los padres usaron el yate de un amigo para hacerlo

La policía portuguesa no descarta que el cuerpo de Madeleine ya no exista e incluso que haya sido tirado dentro de una bolsa en alta mar desde el yate de un amigo de los padres, que inicialmente fue investigado por la policía, según argumentó ayer la prensa portuguesa.

   Sin embargo, las pruebas forenses que condujeron a colocar a Kate y Gerry McCann como sospechosos oficiales de la desaparición de su hija Madeleine no muestran que la niña haya muerto, según publicó The Times.

   Un detective implicado en el caso dijo que, aunque los investigadores tienen evidencias circunstanciales, no pueden probar qué ha sucedido con Maddie, la niña británica de cuatro años desaparecida el pasado 3 de mayo en el Algarve (sur de Portugal).

   El responsable de la Policía Judiciaria portuguesa, aseguró que “hay muchos indicios, pero sin más elementos, es imposible determinar que ocurrió en las cuatro horas vitales en la desaparición”.

   Los detectives no han podido esclarecer qué sucedió entre las 18 horas del 3 de mayo, cuando los padres dejaron acostada a su hija en el departamento que habían alquilado en la localidad veraniega de Praia da Luz, y las 22, momento en el que según dijo Kate, se encontró la cama vacía de la nena.

   En este contexto, la policía portuguesa quiere entrevistar otra vez a los amigos británicos que acompañaron a la pareja de médicos en Portugal. Se cree que ya se encuentra en Reino Unido un equipo de investigadores.

   Los McCann fueron interrogados anteayer por los servicios sociales británicos.

   Las autoridades podrían retirar a los McCann la custodia de sus otros hijos. La pareja tiene dos gemelos más pequeños que Madeleine, Sean y Amelie.



Inquietante. Ayer, la prensa portuguesa, que argumenta sus hipótesis con informaciones recogidas de fuentes cercanas al caso, ha desvelado que la policía portuguesa baraja la teoría de que el cuerpo de Madeleine puede no existir debido a que el cadáver de la pequeña podría haber sido arrojado al mar desde el yate de un británico. El propietario de la embarcación llegó a ser investigado en relación con el caso cuando se sospechaba de otro ciudadano de Reino Unido, Robert Murat.

   Una de las líneas de investigación sostiene que la nena pudo morir dentro del departamento que ocupaba con sus padres en la urbanización

The Ocean Club, por lo que la desaparición del cadáver “puede significar que la muerte no fue accidental”, según fuentes policiales.

   El repentino cambio en la investigación, que se centra en los padres de la menor, se produjo después de que las autoridades recibieran desde un laboratorio de Inglaterra los resultados de las pruebas forenses recuperadas del departamento en el que pasaban las vacaciones y de donde Madeleine desapareció.

   Unos perros entrenados en el Reino Unido detectaron pequeños restos de sangre y olor de cadáver en el departamento y en efectos personales del matrimonio McCann.

   El rastro de cadáver detectado por los perros ha llevado además a la policía a analizar fibras de un sofá del departamento de los McCann y del peluche favorito de Madeleine, que su madre lleva siempre en la mano incluso al comparecer a los últimos interrogatorios.

   Al mismo tiempo, el sacerdote de la Iglesia Anglicana Haynes Hubbard, que convivió con el matrimonio McCann en Praia da Luz y vivió de cerca su sufrimiento, consideró “un absurdo” las sospechas que recaen sobre Kate y Gerry. “La policía tiene que concentrarse en encontrar a Maddie. No sabemos si ella está muerta. Aquí no encontrarán nada”, afirmó el religioso.(DyN)

Kate y Gerry McCann siguen siendo los principales acusados del caso.