Año CXXXVII Nº 49583
La Región
Opinión
El Mundo
Cartas de lectores
La Ciudad
Educación
Policiales
Autos
Información Gral
Política
Mundo digital



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 26/08
Economía 26/08
Señales 26/08
Educación 25/08
Mujer 25/08
Estilo 04/08

contacto
servicios
Institucional




 domingo, 02 de septiembre de 2007  
El sur se viste de blanco y negro

La temporada de avistaje de pingüinos comenzó en La Patagonia, y la ciudad de Trelew se prepara para recibir a los 100 mil turistas que visitarán Punta Tombo. Con un plan de inversiones en mejoras de infraestructura y señalización, Trelew amplió la oferta de atractivos turísticos que se mueven detrás de su principal eje que, el pingüino de Magallanes.

Así, el Parque Paleontológico Bryn Gwyn, el Dique Florentino Ameghino, Gaiman o el Museo Paleontológico Egidio Feruglio, se convierten en interesantes opciones para que el turista estire su estadía en la región. Con un aeropuerto con capacidad para 500 pasajeros diarios, pero con un ambicioso plan de expansión para llevarlo a la categoría de internacional en los próximos 10 años,Trelew se posiciona como la puerta de ingreso a las reservas naturales y las visitas paleontológicas. “Somos el centro de la región, por su ubicación estratégica y equidistante de los principales atractivos turísticos”, afirmó el intendente de Trelew, César Mac Karthy.

Remarcó que “las reservas turísticas aumentaron 20 por ciento con respecto al año pasado”, y precisó que “la ocupación ya ronda el 90 por ciento de la capacidad hotelera de Trelew”, que supera a las1.500 camas. Los hoteles realizaron en los últimos meses algunas reformas y ampliaciones, pero lo más importante es que con la licitación para la nueva concesión del Aeropuerto por 25 años, que incluirá su ampliación de 500 a 1.000 pasajeros, despertó el interés de fuertes inversores de construir nuevos establecimientos, incluso algunos de categoría cinco estrellas.

Punta Tombo es la colonia de pingüinos magallánicos más grande del mundo, y no sólo eso, no existe otro asentamiento de pingüinos de esta magnitud a la que se pueda acceder tan fácilmente. Es una estrecha y pedregosa franja que penetra en el mar unos 3,5 kilómetros; sus amplias playas presentan un suave declive que aprovechan los pingüinos para formar sus nidos.

Entre agosto y septiembre, se puede apreciar el arribo de machos y hembras, la lucha territorial y el armado de los nidos; en octubre, es la época de incubación de los huevos, entre 30 y 45 días; en noviembre, se dan los nacimientos y primeros cuidados para los pichones; y en diciembre, el crecimiento y una intensa actividad sobre la playa.

Península de Valdés es uno de los pocos lugares en el mundo que ofrece la posibilidad de observar en su ámbito natural tanta cantidad de animales. Gigantescas ballenas a unos pocos metros, lobos y elefantes marinos, pingüinos, numerosas aves, guanacos y otras especies terrestres se concentran en esta Reserva Natural de 360 mil hectáreas.

Tan destacable es la población faunística de esta zona de la Patagonia, que la Unesco declaró a este sitio “Patrimonio de la Humanidad”.


enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
El avistaje de pingüinos comenzó en la Patagonia.


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados