Loco de la Escopeta: pericia favorece a los hermanos Bertuzzi

Una pericia de Gendarmería Nacional alivió la situación procesal de los hermanos Lino y Alberto Bertuzzi, quienes llevan dos años presos por uno de los ataques atribuidos al Loco de la Escopeta. El informe le quitó peso a la acusación contra los hermanos al plantear que un estudio de la policía rosarina que los incrimina fue realizado “sin fundamentos técnicos suficientes”.

   El informe llegó ayer al juzgado de Sentencia Nº 2, a cargo de Antonio Ramos, donde se desarrolla el juicio contra los Bertuzzi por el ataque a un colectivo de la línea 107 en el viaducto Avellaneda, ocurrido el 23 de mayo de 2005. Con la pericia, la etapa de pruebas llega a su fin y ahora será el turno de los alegatos, antes de que el magistrado de a conocer su veredicto. Hasta el momento no surgió una prueba directa contra los hermanos.



Pericia forzada. “Creemos que la primera pericia policial fue forzada para dejar a los Bertuzzi detenidos, y así lo vamos a sostener en el alegato. Se partió de la idea de que el disparo pudo partir del vehículo de los hemanos, pero no se consideraron otras opciones. Por eso interpretamos que es un prueba inducida”, dijo Adrián Ruiz, abogado de los Bertuzzi junto a José Ferrara. Los defensores habían requerido la pericia de Gendarmería para determinar si eran viables las conclusiones de la policía rosarina.

   Ese estudio realizado por la Unidad Regional II determinó que los disparos pudieron partir del camión de los Bertuzzi, que según esa hipótesis circulaba en sentido contrario al colectivo cuando fue alcanzado por el escopetazo.

   El informe de Gendarmería, en cambio, plantea que “no se encuentran fundamentos técnicos suficientes que permitan establecer esa verdad”. Y sostiene que se trata sólo de una hipótesis entre otras que no fueron sometidas a estudio. Así lo plantearon el primer alférez Ariel Rubén Maldonado y el alférez Daniel Andrés Rivero, de la Policía Científica de Gendarmería, tras examinar la distancia y trayectoria de los disparos contra el 107.



Sin rigor. “Los peritos plantearon que este asunto debe ser analizado desde todos los puntos de vista. Están diciendo que la conclusión a la que llega la Unidad Regional II no tiene rigor científico”, indicó Ruiz. En base a las fotos del vehículo y a la reconstrucción del hecho los peritos determinaron que las mediciones “no fueron rigurosas” e indicaron que la trayectoria del disparo en relación a los orificios no pueden precisarse analizando “un solo punto”.

   Los peritos también consideraron que el disparo pudo haber partido de otros vehículos. Esto, para la defensa, es significativo porque “hubo un testigo que en el momento vio pasar una chata policial”.

   Mientras que el primer estudio había asegurado que el escopetazo partió de la caja del camión de los Bertuzzi, el nuevo informe dice que “pudo ser de cualquier lado” y que “no se puede determinar si fue desde un punto fijo”.

   Esta no es la primera medida que favorece a los Bertuzzi. En junio fueron desligados por falta de pruebas de un ataque a un 121 en Echesortu. También fueron desvinculados del crimen de Florencia Rubino, la nena de 12 años que murió en abril de 2003 al recibir un escopetazo en la cabeza en un coche de la línea 131.