|
sábado,
01 de
septiembre de
2007 |
Puente de serenidad
Los arquitectos Sandro Procopio y Verónica Mathieu proyectaron una vivienda con formas simples y puras que conjuga las líneas rectas con la serenidad de la nauturaleza. La casa, que originalmente estaba destinada a ser un club house, después cambió de destino y hoy conforma el mojón inicial del predio Chacras Prosperity Lands, ubicado en la zona residencial de la vecina localidad de Roldán.
Por estar situado en un sector de pujante crecimiento inmobiliario impulsó al propietario a iniciar un desarrollo urbanístico en lugar de la explotación del suelo que tenía hasta entonces la zona.
El proyecto se gestó a partir de la propuesta del comitente de generar un espacio común (club house). Pero durante el proceso proyectual se decidió no realizarlo y se construyó en su lugar una vivienda privada. Dado que los terrenos eran de superficies generosas se llegó a la conclusión de que no se justificaba tener un espacio de uso común para once lotes, ya que todos los predios permitían desarrollar diversas actividades en forma exclusiva.
Al ser esta la primera vivienda del predio y no teniendo un entorno conformado no existían condicionantes para el proyecto (tipologías o vegetación existente). Esta suma de situaciones dio vida a la idea de generar una vivienda con un área social similar a la de un club house a la que se le anexó el área privada, desarrollándola toda en una sola planta.
Formalmente se recurrió a dos bosques conectados por un puente ampliamente vidriado que cruza un espejo de agua y que desemboca en la piscina, logrando maximizar la relación con el exterior y creando un clima de serenidad.
Se utilizaron dos prismas menores, girados con respecto a los principales, donde se ubicó el ingreso, la parrilla y el lavadero, sirviendo de apoyo a una pérgola que genera la cochera.
El área pública contiene el estar comedor, la cocina, la parrilla y el toilette. Las grandes superficies vidriadas, con visuales de control a todo el terreno, no interfieren con la privacidad de este amplio sector de recepción y permite que quede incorporado funcionalmente al jardín.
En tanto, el área privada, que consta de dos dormitorios y un baño principal, se incorpora al terreno de la misma forma que el área pública.
Toda la construcción se pensó en líneas simples sin ornamentos, con volúmenes puros terminados con material de frente color arena y revestimiento de piedra en los muros que formalmente se destacan por ser contenedores de los volúmenes principales.
En el interior se utilizó yeso, cerámicos rústicos, piso flotante en el puente y el área privada. Y para darle mayor calidez se usó madera como encimera de cocina, barra y baños.
En relación a las aberturas se destaca la puerta de ingreso que difiere de las demás de aluminio negro debido a que es de madera maciza de cedro y cuenta con doble hoja con paños laterales vidriados. La misma le otorga la jerarquía necesaria al sector del acceso.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
|