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martes,
14 de
agosto de
2007 |
Se la ven venir
El abogado de Scarabino defendió su gestión y apuntó
que el interventor debe ser una persona que conozca el club
El abogado Sergio Martiniuk, asesor del presidente provisional Pablo Scarabino, aseguró que Central no fue informado formalmente de ninguna decisión judicial, pero defendió lo actuado desde la reasunción del directivo y apuntó que si se llega a una intervención, ese rol debe recaer en una “persona idónea” a tales fines. “Lo que pasa es que todavía hay que cerrar contratos con algunos jugadores. Por eso deben ser una o más personas conocedoras de la institución. Hay que tener en cuenta que acá hay trabajadores que tienen que trabajar y futbolistas que deben seguir jugando”, resaltó el letrado.
Martiniuk también aseguró que las actuales autoridades canallas no presentarán trabas y se someterán a derecho. “Podemos coincidir o no con lo que decida la jueza, pero no tengo dudas de la buena intención de la magistrada. La eventual remoción de Pablo nos dolería mucho pero no por eso cuestionaremos su accionar”, reveló.
El abogado reconoció que se reunió ayer por la tarde con la jueza de la causa Liliana Giorgetti pero dijo que no hablaron de la posible intervención y que trataron otros temas puntuales como la cuenta para depositar el dinero de la venta de Angel Di María y Andrés Díaz y la compra del 50 por ciento restante del pase del boliviano Ronald Raldes.
En relación a la actuación de la jueza, sostuvo que “todas las resoluciones que tomó fueron conforme a su criterio, tratando de hacer lo mejor para Central. Por eso no tenemos ningún problema con la jueza, al contrario”. Respecto al plazo que venció el domingo pasado y hasta el momento no fue renovado por Giorgetti, analizó que “hasta ahora no ha tomado una decisión pero los tiempos judiciales no son los periodísticos. Toda decisión debe ser revisada y calculo que la magistrada debe estar meditando esa decisión todavía”.
Ante la inminente resolución de la Justicia, Martiniuk se animó a ensayar un particular balance de lo actuado por la comisión directiva desde que reasumió Scarabino. “El club estaba incendiado, no había plata, había un pagaré perdido y debía cuatro meses de sueldos. Hoy (por ayer), con la venta de Di María, la comisión directiva aprobó que se separen los montos correspondientes a los próximos seis meses de sueldo para los jugadores, el cuerpo técnico y el personal”.
Y agregó: “Esta comisión directiva hizo todo para que el club desemboque en un proceso electoral de una manera tranquila, sin problemas económicos, como embargos y pedidos de quiebra. La venta de Di María permitió tener espaldas y negociar en otros términos”.
Para finalizar, Martiniuk se encargó de destacar que “fue esta comisión directiva la que llamó a elecciones”, concluyó el letrado, con una visión particular de la realidad.
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