Jockey venció a Duendes y recuperó la punta del Litoral

Pablo F. Mihal / Ovación

Por orden, por juego pero fundamentalmente por la ambición y la actitud que mostró a lo largo de los ochenta minutos, Jockey Club se hizo acreedor a una nueva victoria, esta vez nada menos que ante Duendes por 19-3 (4-0) en el marco de la novena fecha del torneo Regional del Litoral, Copa Chevallier 2007.

  Desde el arranque mismo del partido, el conjunto verdiblanco empezó a utilizar un libreto del que no se apartó en ningún instante y del que Duendes nunca supo descifrar.

  Con una muy buena labor del pack de forwards, Jockey Club fue haciéndose dueño del campo de juego y de la posesión de la pelota, dos aspectos fundamentales a la hora de establecer las diferencias.

  Salvo en contados momentos del encuentro, el ritmo del partido lo estableció Jockey, a través de su medioscrum Sebastián Preumayr (la figura de la tarde de ayer) quien manejó los hilos con una lectura acertada del juego.

  Pareció como que los dos equipos empleaban velocidades diferentes de juego. Cada uno intentó a su manera y en cierta manera comprometió a la defensa adversaria pero nunca lograron superarla.

  En esa pulseada, Jockey se mostró más ordenado y seguro de sus fuerzas. Sus delanteros se reagrupaban mejor y más rápido y pescaron cuanta pelota anduvo suelta y a la hora de atacar dejaban la sensación de que desequilibraban con mayor facilidad.

  La paridad en el marcador se rompió con un penal del Indio Baetti, quien acertó recién en su tercer intento a los palos cuando el reloj marcaba la media hora de juego. Antes del final, el propio Baetti le bajó el telón al capítulo con otro penal que le dio las cifras al primer tiempo.

  En el complemento, Jockey siguió fiel a su libreto. Uso el kick para posicionarse, presionar y jugar en campo adversario.

  Mientras tanto, Duendes respondía tibiamente, casi sin ideas. Más allá del drop de Giordano, no mostraba sorpresas e intentó erróneamente jugar desde lugares poco recomendables. Y la suma de esos desaciertos le costaron el partido.

  Así llegó el try de Marquardt y dos nuevos penales de Baetti que redondearon una victoria justa e inapelable de un equipo de puso juego, garra y corazón para alcanzar el objetivo.