Proyecto cooperativo para generar energía en base a la colza

La colza comenzó a cobrar protagonismo y se perfila como cultivo que puede deparar sorpresas en Santa Fe, especialmente a partir de la iniciativa impulsada por Agricultores Federados Argentinos (AFA) que inauguró recientemente la primera planta de biodiesel a través de su centro primario Salto Grande, en la localidad del mismo nombre.

La planta que corresponde al proyecto BioFAA fue inaugurada el pasado 15 de junio y tiene como objetivo que cada productor agropecuario logre el autoconsumo y su propia harina proteica.

Con una capacidad para producir 4 mil litros diarios de un biocombustible que resulta un 30 por ciento más barato que el gasoil, la planta puede llegar a abastecer a unas 24 mil hectáreas agrícolas.

Precisamente, una de las características es que mediante este emprendimiento se encarará la fabricación de biocombustible en base a colza —un cultivo poco difundido en la Argentina— y en pleno corazón sojero.



Ecuación de costos

El coordinador del proyecto, Marcelo Rassetto, explicó que “con este cultivo la ecuación económica cierra, ya que al precio que tiene (alrededor de 240 dólares) se puede producir el litro de biodiesel a 1,27 pesos, mientras que con la soja alcanzaría a 2 pesos”, indicó. Además, la colza “se hace en invierno cuando el campo está desocupado y con poca superficie”. También permite “obtener certificados de carbono, encuadrándose en el Protocolo de Kyoto, ya que es el primer proyecto sustentable que con la soja no se podría obtener”, dijo.



Producción cooperativa

Agricultores Federados Argentinos firmó un contrato con 20 productores de la provincia de Santa Fe para sembrar esta oleaginosa de invierno.

Actualmente están por las 300 hectáreas, pero la idea es alcanzar las 2.400 cuando la planta llegue a su máximo de funcionamiento. El círculo se completa con la producción de expeller de colza, unos 8.000 kilos, que se destina a ganadería.

La planta corresponde al proyecto BioFAA, una iniciativa conjunta de la Federación Agraria Argentina (FAA) con la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Villa María y la Industria Gentili.

La misma contó con la asistencia financiera de la Secretaría de Ciencia y técnica a través del Fontar. El proyecto está enmarcado dentro de la ley 26.093 y su decreto reglamentario 109/07.