El ejército libanés controla posiciones en campo de palestinos

Beirut.- Luego de un mes de duros combates, las tropas libanesas lograron controlar hoy la mayoría de las posiciones utilizadas por los militantes musulmanes en el campo de refugiados palestinos de Nahr el Bared, en el norte del país, informó hoy el Ejército del Líbano.

“Todos los altos edificios que utilizaban los militantes de Fatah al Islam para lanzar ataques contra nuestras tropas se encuentran ahora en manos del Ejército libanés y se pueden ver nuestras banderas en lo alto”, dijo un alto funcionario.

“Nos estamos moviendo con cautela en el área debido a las minas, pero la mayoría de las posiciones que solían estar controladas por los extremistas han sido destruidas y están ahora en nuestras manos”, añadió el militar en declaraciones a DPA.

El jefe del Ejército, Michel Suleiman, dijo que se prevé un final de los enfrentamientos en los próximos días. Mediadores palestinos indicaron también que existe la posibilidad de alcanzar un acuerdo de cese el fuego con los militantes que sería seguido del desarme de los islamistas.

Un clérigo palestino, el jeque Mohammed Haj, dijo a la misma agencia que hubo reuniones “muy positivas” con los líderes de Fatah al Islam dentro del campamento, pero no ofreció más detalles.

Hoy, los mediadores palestinos se reunirán con altos dirigentes del Ejército libanés, entre otros aspectos para debatir los detalles de una fuerza palestina que se desplegará en los alrededores del campamento para garantizar la seguridad de unos 2.000 refugiados que aún se encuentran en su interior.

Entretanto, Abu Imad Rifai, representante del grupo palestino Islamic Yihad, dijo a la televisión “Al Manar”, dirigida por Hezbollah, que se realizaron progresos después de que Fatah al Islam “abriera las puertas de una solución” y aceptara la propuesta de “disolverse”.

Los combates en el campamento de Nahr el Bared llegaron en un momento de grave crisis política en Líbano entre el gobierno del primer ministro, Fuad Siniora, respaldado por Occidente, y la oposición liderada por los militantes chiitas de Hizbollah.

Al menos 141 personas murieron, entre ellas 74 soldados libaneses, en la violencia desencadenada el pasado 20 de mayo.

La mayoría de los 40.000 palestinos residentes en el campamento abandonaron el mismo y se prevé que sólo unos 2.000 continúan en su interior. (Télam)