Sylvestre Begnis arremete contra la ministra de Salud

Santa Fe.— El ex ministro de Salud de la provincia y actual integrante de la comisión de salud de la Cámara de Diputados de la Nación, Héctor Sylvestre Begnis, criticó duramente a la ministra Silvia Simoncini por su actuación en el caso de Ana María Acevedo, la joven fallecida en el hospital Iturraspe al negársele un aborto terapéutico y dijo que “el sumario interno es liviano y como no tiene agallas judicializa el tema y patea la pelota afuera”.

El ex ministro señaló que “frente al riesgo de vida de la paciente debía ordenarse el aborto” y acotó que hay que “unificar criterios de procedimientos en casos similares”.

En tanto, Guido Fernández, un ex abogado de la familia señaló que a la mujer se le negó la posibilidad de acceder a una tomografía computada en el hospital de Reconquista luego de recibir atención durante cinco meses por un dolor de muelas, hasta que comprobaron que sufría de un cáncer terminal.

Para el letrado, la doctora Gabriela García la trató en principio por una afección odontológica y solamente le recetó antibióticos y calmantes. El profesional afirma que la joven experimentó la negligencia del sistema de salud y reveló que el padre de la odontóloga, que integraba el consejo de asesores del hospital de Vera, se habría opuesto a que la paciente se realice una tomografía computada.   

Su dolencia derivó en un sarcoma maxilar mortal, aunque por esta patología nunca fue tratada en Vera.

Negativa.
Fernández precisó que cuando los padres de la joven solicitaron una interconsulta, el padre de la odontóloga de Vera votó en contra, razón por la cual los familiares recurrieron al abogado para consultarlo por la deficiente atención que recibió su hija.

Las declaraciones del profesional profundizan el doloroso caso de Ana María, ya que además de las acusaciones por la negativa a la operación y la denuncia penal efectuada por el abogado, se le suma la serie de aparentes negligencias posteriores.

Ulrich Lheren, actual abogado de la familia Acevedo dijo que el 22 de marzo se pidió la operación terapéutica para la joven en el Hospital Iturraspe y fue negado, como consta en la historia clínica.

El profesional explicó que “de acuerdo a la ley, el aborto terapéutico se podía practicar, queda claro que lo tenían que indicar los médicos y no solicitarlo la paciente. Resulta llamativo que se niegue con tanto ímpetu el pedido familiar”.

Recordó que cuando se realizó el diagnostico en diciembre, “según los médicos consultados por la familia, Ana estaba en la primera etapa de la enfermedad, no había metástasis y se podía tratar”, dijo el letrado.